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Autor: mh

Se denuncia persecución en contra de Fernando Villavicencio, su defensa pide medidas cautelares a la CIDH

Los abogados del activista Fernando Villavicencio pidieron ayer a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que le otorgue medidas cautelares para suspender la orden prisión preventiva ordenada en su contra.
Desde el medio día del 18 de septiembre pasado la Policía ejecutó un operativo de vigilancia a la casa de Villavicencio que incluyó el cierre de las calles de acceso a la vivienda, ubicada al norte de Quito.
Esto se dio luego de que el activista se presentara de forma sorpresiva en una rueda de prensa en la que anunció que demandará al ex presidente Rafael Correa, al actual vicepresidente Jorge Glas y a ocho exfuncionarios más del Gobierno anterior, por presunto peculado en la venta de petróleo a largo plazo con China y Tailandia. 
Denunció un perjuicio al país por $ 2.400 millones debido a contratos firmados con empresas de los países mencionados (específicamente con Petrochina), que dejaron a Petroecuador sin capacidad de comercializar su crudo. Esto, al amparo de la figura de alianza estratégica. 
El activista político tiene orden de prisión preventiva en su contra por el supuesto delito de divulgación de información reservada, medida que fue ratificada el pasado 5 de agosto. Debido a esta situación Villavicencio solicitó asilo político a Perú, donde permaneció por más de ocho meses en espera de respuesta.
Luego de que la Policía rodeó la casa del activista, su esposa Verónica Saráuz, denunció mediante redes sociales que temía un allanamiento. “Esa es la respuesta que dan al llamado de Lenin para que denuncien corrupción @fevillavicencio tiene medidas cautelares de la @CIDH”,  cuestionó Saráuz, vía tuiter.
Enseguida se evidenciaron muestras de respaldo por parte de ciudadanos que se han movilizado hacia la vivienda de la Villavicencio y su familia, pidiendo a las autoridades que cese el hostigamiento.
“Hay una persecución sistemática en contra Fernando Villavicencio y su familia por denunciar numerosos casos de corrupción que involucran a los más altos funcionarios de Ecuador. Los constantes actos de intimidación, hostigamientos y amenazas de muerte perpetrados por el Gobierno en su contra persisten hace más de seis años”,  señalaron los abogados del Centro Latinoamericano de Derechos Humanos en una carta enviada al Secretario Ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrão y al Relator Especial para la Libertad de Expresión del mismo organismo,  Edison Lanza, este 19 de septiembre.
En el documento se relata que tras las denuncias de irregularidades cometidas por el Gobierno de Correa en la negociación con Petrochina, hechas por Villavicencio a su retorno a Ecuador, el Fiscal General, Carlos Baca Mancheno, advirtió que la orden de prisión en su contra estaba vigente y podía ser detenido en cualquier momento.
Esa misma tarde, agentes de la SENAIN (Servicio de Inteligencia de Ecuador) acudieron a la entrada de la vivienda del activista, así como patrulleros de la Policía Nacional. 
La defensa de Villavicencio narra que los agentes policiales comenzaron a requisar a todas las personas que circulaban por las inmediaciones y los autos que salían del edificio. En poco menos de dos horas más de 20 autos sin placa del Estado rodearon la vivienda familiar. Incluso el comandante de la Policía Judicial se presentó en el lugar, pero permaneció escondido para no ser identificado.
En esta carta se enfatiza que a estos hechos hay otras circunstancias que agravan aún más la situación del periodista, pues este se vio obligado a regresar a Ecuador, a pesar de la orden de prisión preventiva en su contra debido a que “su permanencia en el Perú se tornaba cada vez más peligrosa. Su vida e integridad física se encontraban en riesgo. Empresarios vinculados a la intermediación petrolera habían comenzado a perseguirlo y acosarlo para evitar que continuara denunciando escándalos de corrupción petrolera que los involucraba la magnitud del operativo desplegado revela no solo la intención de apresar a Villavicencio sino también el propósito de intimidarlo y hostigarlo para silenciar su libertad de expresión.
Por lo tanto, los abogados del activista plantean que sean otorgadas las medidas cautelares solicitadas a la CIDH el día 2 de noviembre de 2016 y ampliadas el día 23 de diciembre de 2016, el 28 de marzo, 27 de junio de 2017 y el 9 de agosto de 2017, a fin de suspender la prisión preventiva ordenada en su contra.
También piden que el Estado de Ecuador otorgue medidas de protección efectivas para resguardar la vida de Villavicencio, su esposa y sus dos hijos y que cese la persecución y criminalización judicial y política en su contra.
Aseguraron que en este caso se cumple con los tres requisitos  señalados por el artículo 25.2 del Reglamento de la Comisión para el otorgamiento de medidas cautelares: la gravedad, la urgencia y la irreparabilidad del daño.
La gravedad del caso se explica en que "la prisión preventiva a Villavicencio producirá un efecto silenciador, pues se someterá a las personas a constante autocensura antes de denunciar, revelar, publicar o difundir algo que pueda ofender a los más altos funcionarios del gobierno. En este caso la gravedad no solo queda acreditada por la entidad de los derechos en riesgo sino también por la desprotección que tienen las víctimas ante la inacción por parte de las instituciones que debieran velar por la seguridad y resguardo de las vidas de sus ciudadanos”.
Es urgente la medida cautelar debido a que hay la amenaza inminente de que la reclusión en un establecimiento carcelario de Villavicencio puede materializarse en cualquier momento.
En cuanto a la irreparabilidad, se señala que "la decisión de privar preventivamente de la libertad al periodista tiene un efecto pluriofensivo sobre múltiples derechos y otros bienes jurídicos , que, de ser contraria a la Convención Americana, resultaría imposible reparar íntegramente con posterioridad”.
En este contexto la defensa de Villavicencio advierte también que si la Comisión no adopta estas medidas cautelares la prisión preventiva ordenada contra de Villavicencio agudizará el marco intimidatorio – ya existente – en contra de otros periodistas y de cualquier persona que quiera denunciar situaciones similares. 
En la solicitud se resalta también que en este contexto deben considerarse las medidas cautelares otorgadas el 24 de marzo de 2014 (MC 30-14) y que continúan sin ningún tipo de cumplimiento por parte del Estado, luego de más de tres años de su otorgamiento. En enero de este año las autoridades del Gobierno de Correa señalaron que no viabilizarán el pedido de medidas cautelares en favor de Villavicencio, indicando que “Ecuador lamenta la postura de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que "con sus opiniones se involucra en asuntos nacionales y, lo que es peor, asume una posición de evidente injerencia política a favor de alguien que de manera reincidente ha infringido la ley". En un comunicado del Ministerio de justicia se dijo que "el Gobierno del Ecuador rechaza las pretensiones de Fernando Villavicencio de victimizarse ante la CIDH, para que esta entidad se pronuncie a su favor por una supuesta afectación a sus derechos".
Ahora, las nuevas autoridades de Gobierno han dicho que están analizando la situación legal del activista. "Nosotros damos cumplimiento a las órdenes de detención y las personas que son requeridas por la justicia. Vamos a tener una reunión con el ministro, vamos a evaluar todo lo que tenemos judicialmente… Si tiene boleta habrá que detenerlo", dijo ayer el comandante de la Policía, Ramiro Mantilla. 
La tarde de este miércoles el Ministerio del Interior y la Policía Nacional emitieron un comunicado en el que desmintieron que el coronel Ramiro Ortega, director nacional de la Policía Judicial e Investigaciones, haya agredido a la hija de Villavicencio en el operativo de vigilancia que se realiza a su domicilio. En redes sociales, Verónica Sarauz, esposa de Villavicencio acusó a Ortega de intentar "agredir a mi hija menor de edad porque le tomó esta foto (cuando) estaba escondido tras un basurero".

Tambalea grupo económico Eljuri, el más grande de Ecuador, por lavado y evasión

Un sombrío banco en Curazao con el que se pagaban sobornos de Odebrechet fue el detonante. El grupo tiene tentáculos en Colombia, Bolivia, Perú y México, entre otros.

Por Gonzalo Guillén* y Christian Zurita, Bogotá.
Colaboración con Hispanopost            

Juan Eljuri Antón, al centro de la foto, fue reconocido como el mejor industrial de Latinoamerica en 2014 y representa al grupo económico mas poderoso del Ecuador

El capítulo de corrupción de Odebrecht en Ecuador es una suerte de cueva de Alí Babá cuyos tesoros ocultos e infracciones maliciosas comienzan a asombrar al mundo. Tiene huyendo al hombre más rico de ese país, Juan Eljuri Antón –con enormes tentáculos en Colombia, Bolivia, México y Perú, entre otros– y a su hijo, Juan Pablo Ejuri Ventimilla, contra quien existe orden de captura internacional.

Fuentes policiales y judiciales indicaron que los Eljuri se esconden, probablemente, en Curazao.
Los primeros visos de este caso –como en los demás países del área– brotaron en las confesiones de ejecutivos de Norberto Odebrecht, dueño de la multinacional brasilera de la construcción que poseía una división especializada en obtener contratos mediante sobornos alrededor del mundo. Las delaciones revelaron que empresarios ecuatorianos movieron dinero en efectivo para el pago de sobornos y hoy se sabe que éstos usaron el enigmático banco South American Internacional Bank –Sai Bank–, de Curazao. El principal receptor-intermediario ha sido identificado como José Terán Naranjo. Este último, al ser requerido por la fiscalía de su país, reconoció que recibió dinero de la constructora brasileña: “Se hace una suerte de remesas con ese dinero, me ponen a mí [en Ecuador] contra la cuenta de Curazao y así nunca hay una repatriada de fondos” declaró.
Terán repartía el dinero de los sobornos a través de tres empresas panameñas, de las cuales pudimos identificar a tres en fuentes oficiales (Beelvedear, Jourvet y Alesbury) y otra de Curazao, llamada Stock, todas ellas con cuentas en Sai Bank.
En el interrogatorio que le hizo la Fiscalía, Terán explicó con mayor claridad la manera como llegó a sus manos el dinero que distribuyó entre altos funcionarios del gobierno de Rafael Correa. A una pregunta sobre cuál fue la relación entre las firmas Alesbury y Jouvert con el Sai Bank, Terán respondió: “Se me recomendó dicho banco a través del estudio jurídico Mossack Fonseca”, la firma panameña célebre porque sus archivos secretos salieron a la luz pública bajo la denominación mundialmente conocida como Panamá Papers., cuyos nexos con el grupo Eljuri se explican más adelante.
Enseguida, una fiscal le preguntó de dónde procedían los fondos depositados en las cuentas de Alesbury y Jouvert. Terán contestó: “De la compañía Norberto Odebrecht”. Al pedirle explicación sobre cómo recibía los fondos, Terán dijo: “Se me comunicaba que la transferencia había sido acreditada y se me entregaba en efectivo en la que era mi casa, en la ciudad de Quito”.
No existe información del movimiento de dinero de estas empresas relacionadas con la corrupción de Odebrechet en Ecuador, pero se sabe que el Sai Bank movió en las cuentas de ellas al menos USD $ 153,7 millones entre 2012 y 2017.

José Rubén Terán, empresario involucrado en el caso de los sobornos de Odebrecht en Ecuador, reconoció que recibió dinero de la constructora y que utilizó el Sai Bank para recibir dinero en efectivo
Sai Bank posee pequeñas oficinas en las ciudades ecuatorianas de Quito, Guayaquil y Cuenta. En esta última opera la principal de ellas.
La fiscalía ecuatoriana detuvo a un funcionario de la oficina de Quito, identificado como Juan Borja, y éste pronto reveló que el banco era propiedad exclusiva del grupo empresarial Eljuri. Su trabajo, dijo, consistía en buscar clientes interesados en abrir cuentas y pólizas en la oficina principal de Curazao y entre las ventajas que ofrece está la evasión de impuestos y, de ser necesario, el lavado de dinero. Una operación semejante a la del colapsado Fondo Premium, de Colombia, que también lavaba dinero procedente de distintas partes y ayudaba a evadir impuestos con depósitos en Curazao.
Borja declaró que las maniobras y la dirección del Sai Bank en Ecuador se ejercen desde la oficina de Cuenca, donde también está la sede central del Grupo Eljuri. La fiscalía, sin embargo, nunca ha tocado esa sucursal, a través de la cual pasa toda la documentación correspondiente a los dineros que van para Curazao.
Un empresario de la ciudad de Cuenca explicó –bajo la condición del anonimato– la manera como él mismo hizo uso de los servicios ilícitos de Sai Bank: “Me dieron un crédito y los pagos no los hacía en las oficinas de ese banco sino en otro llamado Capital, una entidad pequeña que se encarga de acreditarle a Sai Bank en Curazao, es un tema de compensación que no requiere cruzar fronteras”.
El empresario consultado expuso los pormenores de la manera como tramitó y obtuvo el crédito en Sai Bank: “El directorio del banco se reúne en la matriz de Juan Eljuri, en Cuenca, y era el propio Juan Eljuri Veintimilla el que aprobaba las operaciones de crédito”.
Al ser consultado, Sai Bank emitió un comunicado negando operaciones financieras prohibidas en el Ecuador, pero reconoció que se dedica a la “compraventa de cartera”. Sobre Juan Pablo Eljuri Veintimilla, dijo: “no ostentaba ni ostenta el cargo de Director de SAI-Bank en Ecuador, como se ha dicho, debido a que esta denominación societaria no existe”.
Hasta el momento, han sido arrestadas tres personas vinculadas al banco, el cual ya tiene frente a ellas una estrategia de defensa: “no son funcionarios del banco, pero sí prestaron servicios profesionales a través de un subcontratista domiciliado en Curazao”.
Eljuri, el marqués de Carabás ecuatoriano
Como en el antiguo cuento infantil europeo de El Gato Con Botas, en el que todas las propiedades pertenecen al Marqués de Carabás, de unos años para acá las grandes empresas y los negocios más prósperos en el Ecuador pertenecen a Juan Eljuri, un hombre silencioso y extravagante, pero desconocido, de origen libanés, que ha comenzado a sonar cada vez con mayor fuerza en Colombia desde cuando obtuvo la franquicia de Hyundai tras en un pleito multimillonario con el grupo empresarial colombiano Hyundai Colombia Automotriz.
Las pocas fotografías que se conocen de las mansiones de Eljuri y de los multimillonarios tesoros que guarda en ellas hacen recordar a ojos vista y superan las montañas de dinero, joyas y obras de arte de personajes colombianos tristemente célebres, como José Gonzalo Rodríguez Gacha, “El Mexicano”, o Pablo Escobar.
La fortuna en oro macizo y arte la guarda en su búnker de las remotas y frías montañas andinas de Cuenca, pequeña ciudad colonial de 330 mil habitantes, fundada hace 500 años y hoy capital de la provincia de Azuay.
Por su origen colonial, su entorno andino de alta montaña y el tamaño intermedio de su población, Cuenca se asemeja a Tunja, en Colombia. 
El jefe del clan familiar fue Jorge Eljuri Antón, cuya vida se apagó en cuatro minutos el 19 de julio de 2014, solía llevar en su meñique izquierdo el codiciado anillo de diamante negro que perteneció a Frank Sinatra.

Buena parte de los tesoros de Jorge Eljuri se conocieron gracias a su publicación en una revista especializada para coleccionistas
Entre la fortuna en oro que dejó en forma de joyas y lingotes, hay 300 kilos de oro prehispánico que siguen en manos de su familia, lo mismo que los mejores espejos de Nicolás II, el último zar ruso, y más de ocho mil obras de arte virtualmente certificadas como genuinas, entre ellas de El Greco, Picasso o Lichtenstein.
Esta colección posee una pieza única de plata Thomas Pitts (1765) elaborada en honor al Rey de Inglaterra, así como una mesa azul de una sola pieza de ormolu (amalgama de oro molido, mercurio y bronce) que, se dice, perteneció a Napoleón III.
Los hermanos Eljuri Antón son hijos del modesto inmigrante libanés Gabriel Eljuri Hann, quien llegó a Ecuador en los años 20 del siglo pasado, se estableció en la entonces ínfima y lejana Cuenca, donde se dedicó al comercio en pequeñas cantidades de telas, radios, cosméticos y bicicletas.
La mansión de los Eljuri en Cuenca, con cúpulas y estatuas clásicas exteriores en oro, que contrastan con los modestos tejados coloniales de dos aguas de la vieja ciudad, supera en tamaño y obras de valor a Neverland, la controvertida y escandalosa villa de Michael Jackson, en las Vegas.

Residencia de la familia Eljuri en Cuenca
 
Fortuna a toda prueba
La fortuna de Eljuri le permitió, durante la mayor parte de 2016, comprar mensualmente dos mil carros Hyundai para el mercado de Colombia que no podía vender. Su acuerdo con la casa matriz lo obligaba a hacer esas adquisiciones. Los llevaba desde Corea y amontona en puertos marítimos y almacenes sin la posibilidad de comercializarlos debido a que dos jueces se lo prohibieron hasta cuando logró liberar la franquicia en su favor, pues le pertenecía al grupo de Carlos Mattos, quien fundó la agencia comercial y la consolidó durante más de 20 años, a lo largo de los cuales importó y vendió cerca de 200 mil vehículos. En enero pasado, Eljuri debió sacar del país todos aquellos vehículos que importó en 2016, pues la legislación colombiana impide vender automotores nuevos fabricados en años anteriores.
Eljuri no solamente resistió el tren de gastos de esas importaciones y el mantenimiento de su red de exhibición y ventas congeladas por la justicia, sino que, en una reunión privada, de acuerdo con una fuente consultada por los autores de este reportaje, dijo estar en capacidad de intentar comprar al Presidente de Colombia si llegara a considerarlo necesario para conseguir que la franquicia quedara definitivamente en sus manos.
Conocedores del mercado automotriz en Colombia estimaron que debido a la prohibición que recibió para vender productos Hyundai, Eljuri perdió en este país unos cuatro y medio millones de dólares mensuales, desde octubre de 2015. Indicaron que Hyundai Colombia Automotriz vendía 1.800 vehículos por mes y que el ecuatoriano probablemente se vio comprometido con la firma matriz a vender unos 2.000. Estas cifras no las confirman ninguno de los dos grupos en disputa.
De acuerdo con el Servicio de Rentas Internas de Ecuador, SRI (el equivalente a la DIAN colombiana) Eljuri posee la fortuna de apariencia más creciente y bienes más deslumbrantes de ese país. Por encima, incluso, de los grandes millonarios mexicanos o colombianos cuyos patrimonios y posesiones nominales superan ampliamente a las del nuevo magnate ecuatoriano.
De acuerdo con los registros correspondientes del SRI, revisados para este reportaje, el grupo Eljuri posee 327 empresas y fideicomisos que desde 2007, cuando comenzaron los gobiernos consecutivos de la "revolución ciudadana", de Rafael Correa, han crecido como la espuma.
Las cifras oficiales que maneja el SRI indican que en 2008  ese grupo recibió ingresos totales por USD $ 1’279.043.017 y su participación en la economía del país fue del 2,23 por ciento. Cuatro años después, en 2012, subió a USD$ 2’143.053.239 de ingresos y una participación de 2,49 por ciento.
Hoy día, la vida de los ecuatorianos depende en alto grado de los Eljuri: importan y fabrican más que nadie todo tipo de electrodomésticos; operan el sistema TV Cable, que ofrece internet, televisión pagada y telefonía fija; representan las marcas de automotores Hyundai, KYA, Volkswagen, Ford, Skoda y distribuyen la marca de motocicletas Suzuki. Poseen una industria cerámica de primer orden y controlan el sistema de embotellamiento y distribución de licores y perfumes. En todos los campos en los que están metidos dominan el mercado.
El patriarca actual de la familia, Juan Eljuri Antón, es descrito por parientes y por otros empresarios de ese país como un hombre agresivo en los negocios que emplea a fondo todo su poder económico cuando se propone imponer su voluntad.
Este conglomerado familiar fue desnudado por su presencia notable en los llamados Panamá Papers. Los diarios holandeses Trouw y Het Financieele Dagblad publicaron en abril del año pasado historias sobre cómo Juan Eljuri utilizó los servicios de la firma panameña de abogados Mossack Fonseca (MF) para beneficiarse con las más altas ganancias posibles en un millonario contrato que firmó con el gobierno de Ecuador para entregar 4.157 carros patrulleros marca KYA, destinados a la Policía Nacional, por un valor de USD $196,190,014.84.
En la primavera de 2015, Juan Eljuri propuso una idea que MF canalizó a través de una empresa de servicios corporativos de Suiza: pidió que las piezas de automóviles fabricadas por una de sus empresas en Brasil (Rontan) fueran enviadas a Ecuador al doble de su costo original sin que las autoridades fiscales brasileñas o ecuatorianas se dieran cuenta. 
Los diarios holandeses contaron que MF gestionó ese pedido con la firma Infintax que, a su vez, utilizó a la empresa suiza YouSee para comprar, por medio de fiducias, piezas de automóviles de Rontan y luego las vendería al doble del precio a la filial ecuatoriana de Eljuri, Pronae. Se reconocieron facturas falsificadas y documentos de embarque que le dieron aspecto de legitimidad al proceso de compra.
Uno de los diarios holandeses mencionados, informó: “Cada mes, YouSee enviaría más de medio millón de dólares a Pronae en Ecuador y pagaría a Brasil la mitad. La operación debe continuar hasta diciembre de 2017 -se trata de un total de aproximadamente US$ 15 millones. La mitad enviada a Eljuri por esa vía quedaría sin ser vista por el recaudador de impuestos. Para eso, Infintax hizo uso de la filial suiza, y la cuenta bancaria relacionada, con USD 400.000, para mantener las operaciones. Infintax reacciona e informa que el proyecto nunca se materializó en última instancia. Sobre las razones de ello, la oficina no dice nada”.
Los informes de los diarios holandeses fueron traducidos en Ecuador por el portal de investigación Planv.com.ec pero ninguna autoridad ha examinado ese contrato que celebró el Ministro del Interior con Eljuri.
Exportaciones ficticias
El grupo Eljuri, a través del Banco del Austro, de su propiedad, fue nombrado en la participación de exportaciones ficticias entre Venezuela y Ecuador. El caso se originó con base en el acuerdo que a fines de 2008 Rafael Correa y Hugo Chávez impulsaron para la creación del Sistema Único de Compensación Regional (SUCRE), una estructura de pagos basada en el cruce de cuentas entre bancos centrales de los países miembros de la hoy moribunda Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA). Este sistema movió entre Caracas y Quito exportaciones e importaciones por montos que superaron los USD $1000,000,000. No obstante, muchas de esas transacciones fueron ficticias y sirvieron para sacar millones de bolívares de Venezuela con el fin de convertirlos en dólares en Ecuador. En el trayecto final de estas operaciones fueron usados bancos privados corresponsales, avalados por centrales, con el propósito de sacar el dinero lavado a Panamá.
En Ecuador el tema se investiga y se sabe de la participación en él de entidades financieras. El portal informativo Focusecuador.com publicó, a mediados de 2016, que por ese motivo se incautaron en 2013 USD$ 57.000,000 a empresas relacionadas con exportaciones ficticias. USD$ 8.852.318.00 fueron del Banco del Austro, de los Eljuri.
Se desconoce el estado actual de las investigaciones judiciales.
Correa, aliado de Eljuri
El ex presidente Rafael Correa ha sido un leal aliado del grupo Eljuri, del que recibió apoyo económico desde cuando fue candidato a la presidencia en 2006. En la primera oportunidad que se notó la presencia económica del grupo en el apoyo a la campaña, el tesorero era el hermano del candidato, Fabricio Correa, quien después del triunfo fue descubierto como prominente contratista de grandes obras del Estado. Estas corruptelas las denunciaron en el libro Gran Hermano los periodistas Chiristian Zurita y Juan Caros Calderón. 
Fabricio Correa explicó cómo el grupo Eljuri lo ayudó en sus negocios siendo ya hermano del Presidente de la República: “Ellos quisieron introducir la línea de volquetas Hyundai, entonces me hicieron una propuesta: `¿No te interesa Hyundai?`. Fabricio asegura que preguntó por las ventajas que tendría y, dice, le respondió Eljuri: “Yo te financio. Entonces, les compramos 48 volquetas, nosotros fuimos el conejito de Indias de Hyundai de Eljuri, entonces nos da un crédito del Banco del Austro [de los Eljuri], por eso le digo que debo hartísima plata…”.
Fabricio, además, recibió un crédito-puente del Banco del Austro para iniciar las obras de construcción que el gobierno de su hermano le había adjudicado.
Ese banco de los Eljuri fue fundamental en la entrega de un crédito al primo de Rafael Correa, Pedro Delgado, ex presidente del Banco Central del Ecuador y cónsul en Miami, donde aún vive prófugo de la justicia de su país. Las publicaciones de Panamá Papers son fundamentales para entenderlo: El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) reveló que en 2012  el Austrobank Panamá S.A., filial del Grupo Eljuri, "concedió una hipoteca en favor de Delgado y su esposa. La hipoteca, de USD $190.000, supuestamente fue para la compra de una casa en North Miami Beach". 
En Ecuador se ha denunciado que Delgado se benefició con créditos estatales que fueron cobrados por terceras personas no identificadas (se ha planteado que una de ellas habría sido el propio ex presidente Rafael Correa, quien lo ha negado) y el estratégico préstamo del Austrobank le ha servido para camuflar ingresos virtualmente ilegales que recibió.
En sus informes, El ICIJ informó:"Un agente de Austrobank, de Eljuri, envió un correo electrónico a Mossack Fonseca para obtener asesoramiento legal. El primer despacho de abogados contactado por Mossack Fonseca declinó procesar el préstamo con el argumento de que el prestatario se negaba a cumplir con la documentación estándar requerida para extender una hipoteca. 'Hay demasiados agujeros en esta transacción', escribió el abogado. 'Me preocupan las objeciones del prestatario. Aquí hay algo que no huele bien, en mi opinión ', agregó. Pero Mossack Fonseca encontró otro abogado que procesó la hipoteca en Miami. Delgado ha confirmado a la cadena Univisión que era dueño de una propiedad inmobiliaria en Miami".
Los Panamá Papers pusieron de manifiesto que Eljuri es uno de los grupos económicos de Ecuador que más usa el sistema off shore. De hecho, el SRI ecuatoriano informó sobre seis empresas en Panamá; otras cinco en el Reino Unido y tres en Costa Rica. Trece más figuran en los Panamá Papers y de esas solo dos fueron registradas en Ecuador.
Eljuri y la “lista Clinton”
El espectro empresarial de Eljuri, basado principalmente en comercio exterior, posee fortalezas que parecen afianzarse en la ceguera de las aduanas. En su ciudad natural, Cuenca, existe un distrito aduanero que más parece propiedad de Eljuri que del Estado. Toda su mercadería llega a los puertos marítimos del país sin ser revisada in situ, sólo se realiza una inspección documental que certifica como cierto lo que va escrito en os papeles.
Luego, los contenedores marítimos son trasladados a Cuenca, donde las mercancías ingresan a las bodegas de Eljuri. Buena parte de embarques que llegan allí son catalogados como materia prima (bajos en impuestos), que luego de ensamblarse en productos terminados o embotellarse como licores y perfumes de marca, alcanzan altos valores que en nada se compadecen con sus declaraciones aduaneras iniciales.
Voceros de autoridades de Colombia y Estados Unidos dijeron que investigan supuestos suministros de perfumes del grupo Eljuri a la cadena de tiendas La Riviera, del colombiano de origen libanés Abdul Waked, quien en mayo de 2016 fue inscrito en la llamada Lista Clinton de personas y empresas ligadas al narcotráfico a juicio de Washington. 
Estados Unidos solicitó la extradición de Waked y la Corte Suprema de Justicia de Colombia la aprobó.   
Una nevera llena de relojes
Las revisiones aduaneras a las importaciones de Eljuri en Ecuador no parecen ser muy estrictas. 
Un par de operarios de Almacenes Juan Eljuri hace algunos años bajaron de un camión una nevera, la cargaron hasta una casa de clase media en Ecuador, la entraron, les firmaron el recibido en una planilla de control de entregas y se fueron a llevar hasta otros domicilios más artículos del hogar. En la noche, los dueños, quienes pidieron no revelar sus nombres, abrieron el aparato importado y se encontraron con que estaba lleno con una fortuna representada en relojes que el almacén vendedor nunca fue a reclamar.
En Bogotá, otra persona contó que cuando vivió en Ecuador le ocurrió algo semejante, pero con botellas de güisqui que estaban entre otra nevera que adquirió en el mismo almacén.

*Gonzalo Guillén, periodista colombiano ganador del premio Rey de España en dos ocasiones, ha escrito para el Miami Herald y fue editor general de El Universo y El País de Calí. Actualmente es columnista de Hispanopost  y revista Semana de Colombia

Perú enciende alerta de corrupción petrolera en Ecuador

FERNANDO VILLAVICENCIO VALENCIA

Investigación compartida con revista Caretas de Perú
Entre enero de 2015 y junio del 2017, la empresa estatal petróleos del Perú?—Petroperú— adquirió 15.4 millones de barriles de crudo Oriente, en 42 cargamentos que salieron desde el puerto ecuatoriano de Esmeraldas hasta la refinería de Talara. La entrega estuvo a cargo de las compañías intermediarias Gunvor, Core Petroleum y Petrochina. Según información hasta ahora no revelada, esta operación dejó una pérdida de USD 51.1 millones a Ecuador, y es apenas un capítulo de la mayor trama de corrupción que salpica al gobierno del expresidente Rafael Correa.
Esta historia es así:
Tras ganar la presidencia en el 2006, Rafael Correa, enarboló un discurso contra los intermediarios petroleros a quienes calificó de mafiosos: “Ahora se acabó la intermediación de los crudos. Petroecuador es la única empresa de producción de crudo que yo conozco, que no vende al consumidor final, que es la refinería, sino al intermediario". Pero, los humos radicales solo quedarían en palabras; en la práctica, un agresivo endeudamiento con China, pagado con petróleo, resultaría en el mayor banquete para los intermediarios.
Deuda cara pagada con petróleo descontado
Entre el 2009 y el 2016, el correísmo impulsó líneas de crédito por USD 18.020 millones, con intereses del orden del 7%, garantizadas con la provisión de 1310 millones 400 mil barriles de petróleo y fuel oil, hasta el 2024. Estas operaciones con China se basan en una alianza estratégica (contratos sin licitación) y en el decreto 466 suscrito por Rafael Correa, que garantiza el pago de la deuda con la provisión de petróleo y fuel oil. Según información de Petroecuador (junio del 2017), en contratos de crudo se ha entregado a China y Tailandia 572.5 millones de barriles y resta por cubrir 536.6 millones de barriles, de un total de 1109 millones 160 mil barriles de petróleo comprometidos al pago de créditos, hasta el 2024. El petróleo no es utilizado en las refinerías chinas como lo anunció Rafael Correa, sino revendido en los mercados de Estados Unidos, Perú, Chile y Panamá.

Además de los contratos con China y Tailandia, el régimen de Correa realizó dos operaciones financieras atadas a la comercialización de hidrocarburos. Una línea de crédito por USD 1000 millones —con una tasa de interés del 7,25%, suscrita en el 2014— con la compañía Noble Américas, sujeta a la provisión de naftas; y, un crédito por USD 300 millones, con una tasa de interés del 6,85%, firmado en el 2016, con la empresa Oman Trading International,?OTI, a ser pagado con 17.1 millones de barriles de fuel oil. Estos nuevos convenios suman USD 1300 millones y proyectan una cifra total de USD 19.320 millones de deuda pública garantizada con hidrocarburos.2

Para la facturación de los crudos de Ecuador, se tiene como referencia el crudo West Texas Intermediate WTI, al cual se le aplica un diferencial (castigo) que incluye el flete en buques. Una investigación de Focus de 2016, reveló un sobreprecio de casi 2 dólares por barril en fletes, además de otras pérdidas por primas inferiores a las del mercado.

Un reciente informe de la Contraloría puso en la superficie algo difícil de creer: la fórmula de precios aprobada por el gobierno de Correa, fue elaborada por Petrochina, la compradora del petróleo. De esta forma, Petrochina, Unipec y PTT, se aseguraban un precio inferior al del mercado en el cual sería revendido ese crudo.
Caso Petroperú enciende la alerta
Según información revisada, los precios de facturación de los 42 embarques recibidos en la refinería de Talara, por Petroperú, entre el 2015 y el 2017, a través de Gunvor, Core Petroleum y Petrochina (en los que se aplicaron precios de mercado), son superiores a los facturados FOB (libre a bordo) por parte de Petroecuador a Petrochina, Unipec y Petrotailandia, sin licitación, en el puerto de Esmeraldas. Por ejemplo: el 10 de agosto del 2015, el buque Chimborazo descargó 376 mil barriles de crudo. El precio facturado por Petroperú fue de USD 16.4 millones, mientras el reportado por Petroecuador del mismo embarque, fue de USD 12.7 millones. La diferencia de USD 3.6 millones, fue al bolsillo del intermediario. Esta diferencia de precios se origina en la manipulación del diferencial por parte de Petroecuador/Petrochina, en particular al haber inflado los fletes.

Durante el 2015, Petroperú adquirió 5 millones de barriles, en ese año el perjuicio fue de USD 22.8 millones. En el 2016, se comercializaron 6.9 millones, la pérdida llegó a USD 18.1 millones. En lo que va del 2017, se entregaron 3.4 millones, el perjuicio fue de USD 10.2 millones. En total, de acuerdo con la información revisada, el beneficio de los intermediarios, llámese pérdida para Ecuador, fue de USD 51.1 millones.

Si proyectamos el esquema de pérdidas en la operación con Perú, al conjunto del negocio con China y Tailandia, considerando una diferencia mínima de 2 dólares por barril, sobre un volumen de 1.310 millones 400 mil barriles, los intermediarios acumularon una fortuna no menor a USD 2.620 millones.
Para el presidente del Colegio de Abogados de Pichincha, Ramiro García, resulta grave que se haya contratado crédito chino carísimo, pagado con petróleo descontado y que, además, una empresa china contratada por el gobierno de Correa, subcontrate intermediarios vinculados al propio gobierno, para revender el petróleo en los buques del Estado (Flopec) a nuestro vecino (Perú), cuando lo elemental era hacer un acuerdo con Perú y entregar el crudo directo. García anuncia la formalización de una acción penal en contra de los responsables, entre los que incluye al expresidente Rafael Correa. El delito principal sería el peculado.

Un laberinto de empresas offshore

Según el libro Ecuador made in China, a partir del 2009 se montó un entramado de reventa del petróleo, utilizando intermediarias como Gunvor, Castor Petroleum, Taurus Petroleum, Core Petroleum, que actúan en calidad de pantallas de Petrochina, Unipec y Petrotailandia.
Un gran manto de oscuridad esconde la operación de la intermediación con el crudo ecuatoriano, acción liderada por Petrochina; sin embargo, nueva información confirma la existencia de una máscara societaria, creada en el paraíso fiscal de Panamá y operada desde Houston, EEUU. Se trata de Petrochina International América. Esta firma offshore maniobra todos los procesos a nombre de Petrochina Beijing, la cual dispone a Petroecuador, remita las facturas y conocimientos de embarque a nombre de su supuesta subsidiaria, la cual no tiene ninguna relación jurídica con Petroecuador.
Después de revisados varios Bill of Lading (Conocimientos de Embarque) se verificó que cargamentos consignados a Petrochina fueron endosados al consumidor final por el apoderado de la empresa Taurus Petroleum, el abogado Bayardo Poveda, primo hermano de Rafael Poveda, quien fue ministro de los Sectores Estratégicos, una persona de confianza del vicepresidente de la República, Jorge Glas.

Con la filtración de los Panamá Papers se confirmó la investigación del 2013. De acuerdo con los documentos de Mossack Fonseca MF, la empresa Castor Petroleum, de propiedad de Gunvor Group (vinculada a Vladimir Putin, según informe de EEUU), pagó una comisión de un dólar por barril a los ecuatorianos Enrique Cadena Marín y Jaime Baquerizo Escobar (detenido y luego liberado en Perú). Los pagos se hicieron desde Waterway Petroleum, subsidiaria de Gunvor, a la offshore Eston Trading, de Nevada, a solicitud de Baquerizo.


Según la misma información, el pago para la creación de Eston Trading, fue realizado por la compañía ecuatoriana Naparina Corp., cuyo titular es Enrique Cadena. Una parte de la comisión de Eston Trading (USD 0,20) se transfiere a Naparina y a otra empresa ecuatoriana, Oil Services & Solution (0SS), de Jaime Baquerizo. Los restantes USD 0,80 por barril, pasan a la firma Livingston Financial Corp., domiciliada en Dubai, la cual transfiere ese dinero a los Estados Unidos. Livingston también está relacionada con Cadena y Baquerizo, según MF. Por primera vez se publica el documento completo.

 

 

El camino de la impunidad


Jorge Glas en su visita a la Asamblea Nacional el pasado 21 de junio, dijo ser el responsable político de las mega obras que Odebrecht construyó en el país. La delación del ex superintendente de esa constructora, Jose Santos Filho, dice que el vicepresidente recibió sobornos por 14 millones de dólares

EDITORIAL

MILHOJAS.IS
Hoy viernes 25 de agosto miramos con decepción la forma en la que el fiscal general del Estado ha dado un paso más para hacer de la justicia en el Ecuador una aspiración inviable. Ello porque en lugar de proceder directamente a la instrucción fiscal, como indica el artículo 589 del COIP, pidió a la Corte Nacional solicite autorización a la Asamblea Nacional para investigar al Vicepresidente Jorge Glas. Tal autorización solamente era necesaria en caso de dictamen acusatorio al terminar  la instrucción fiscal lo que implicaría pasar a la etapa de juicio contra Jorge Glas.   Secundando al fiscal Baca Mancheno, el juez Miguel Jurado Fabara –quien cuenta con el mérito de haber condenado a un ciudadano a dieciocho meses por aplaudir- dirigió a la Asamblea Nacional  un escrito pidiendo tal autorización.  El escrito trastoca el Art. 589 del COIP y reemplaza la norma expresa en él, donde se definen instrucción fiscal, evaluación y juicio como etapas separadas,  por una definición del diccionario jurídico de Cabanellas.
Es decir, contra la naturaleza de su función, deja atrás la norma expresa que es ley de la república ecuatoriana por las generalidades de un diccionario.
Lo actuado por Baca Mancheno y el juez nacional Jurado es de gravedad porque crea una barrera de protección política a favor de Jorge Glas: multiplica las ocasiones en que la asamblea debería ser consultada y votar. Es decir en vez de consultarla cuando se fuera a su juzgamiento, habría que consultarla cada vez que se lo vincule a una investigación.
En el caso Odebrecht puede estar involucrado en varios delitos ¿El fiscal pedirá permiso cada vez que Glas sea investigado? ¿La asamblea autorizará todas esas líneas o múltiples casos de corrupción, que los ecuatorianos sabemos pueden ser decenas?
Para colmo el delito que le lleva al fiscal Baca a pedir autorización de investigación es el más leve e indirecto que pudo encontrar, el de facilitar la comisión de asociación ilícita a favor de otros, cuando Odebrecht lo ha señalado inequívocamente como su hombre en Ecuador.
Hoy a los Asambleístas no les queda más remedio que votar sí.  Se trata de un Sí que no debe ser ingenuo sino demandante, acompañado de la exigencia al fiscal Baca Mancheno de que cumpla las necesidades éticas e históricas del Ecuador.

Apuntes necesarios al informe del ministro de hidrocarburos Carlos Pérez

El pasado 15 de agosto el gobierno emitió un informe preliminar de situación de la industria petrolera. Los datos evidenciaron la crisis del sector, provocada por antitécnicas y corruptas decisiones. Ecuador ha exportado crudo a pérdida para benefició de grupos que se mantienen en la opacidad, levantó una infraestructura industrial que ahora se conoce es inservible y promovió proyectos sin contar con los recursos naturales necesarios para su funcionamiento. Presentamos a continuación unos apuntes a la situación de la industria petrolera, que se mantuvo oculta en los 10 años de correato.
 

Onerosa Deuda

El estado debe explicar por qué el endeudamiento de Petroamazonas alcanzó niveles intolerables con empresas privadas, un hecho que no se compadece con el pasado de Petroecuador. El principio de la explotación de petróleo es lograr utilidades, algo que sucede incluso en las peores condiciones de la industria, sin embargo el Ecuador ha demostrado que explota su crudo a pérdida.
Le corresponde a las nuevas autoridades explicar la estructura de endeudamiento que Petroamazonas labró con la prestadora de servicios Schlumberguer que se encargó de encarecer todos los procesos de extracción a su beneficio.  Los altos costos de producción quedaron en evidencia a fines de julio cuando las nuevas autoridades renegociaron el contrato de servicios en el campo Shushufindi, que redujo la tarifa de $ 29,85 por barril a $ 19,50 por barril. Los $10,35 de diferencia dejan en claro el perjuicio para el estado desde el inicio del contrato.

Preventas petroleras

El ministerio de Hidrocarburos no ha reportado en este cuadro el perjuicio al Estado por preventas petroleras que suma no menos de 3 mil millones, de acuerdo al análisis presentado por Fernando Villavicencio, basado en informes oficiales y análisis de expertos del sector. Hoy se conoce que desde la caída del precio del crudo ecuatoriano, en julio de 2014  a diciembre de 2015, las pérdidas  mensuales crecían en cientos de millones de dólares.
Fue por el error de haber asumido facturar el precio de crudo a futuro cuando la tendencia era a la baja. Al momento el gobierno de Lenin Moreno carece de una política o estrategia de renegociación de esos contratos de preventa, cada dìa se pierde dinero pero eso alguien se beneficia.

El caos de refinería Esmeraldas


Desde el año 2005 en adelante la empresa española Repsol invirtió mas de 2000 millones de euros en una refinería del país Vasco, que le permitió doblar su capacidad de refinación y obtener combustibles incluso de los productos mas pesados, así como generar 42 megavatios de electricidad (la central hidroeléctrica Manduriacu genera 65MW).
Pero los ecuatorianos vivimos otra historia: el proceso de repotenciación de la Refinería Esmeraldas inició en el año 2007, fue promovido por el ex presidente Correa fundamentado en un estado de emergencia. A ese año el proyecto fue valorado en 170 millones de dólares y el ministro de energía era Galo Chiriboga Zambrano. En primera instancia el plan implicaba un acuerdo con la empresa constructora de la refinería: la japonesa Sumitomo Chiyoda, por un monto aproximado a los $680 millones pero las autoridades decidieron contratar, sin licitación, a la koreana SK, que no conocía de este tipo de proyectos. Los procesos de diseño y fiscalización estuvieron a cargo de la firma internacional Worley Parsons, que en Ecuador fue manejada por el amigo del presidente William Wallace Phillips Cooper, promotor del Movimiento Scout y esposo de Mònica Hernández, asesora de Correa.
Fernando Villavicencio publicó en 2015 una parte de las ilegalidades en la contratación, los sobreprecios en los centenares de contratos y los problemas técnicos (104)  encontrados en la flamante Unidad de Crackeo Catalítico.
Luego de la multimillonaria inversión la Refinería Esmeraldas sigue produciendo los mismos combustibles de mala calidad y el mismo volumen de combustibles refinados. El ministro de hidrocarburos Carlos Pérez ratificó lo que desde hace mas de un año se conocía extraoficialmente: No se optimizó el proceso de refinación, es decir, a pesar del alto costo los procesos para obtener mejores productos no se dieron. Antes de la repotenciación era una refinería de mediana complejidad y luego de la inversión, sigue igual.
“La situación es crítica incluso en las áreas donde se realizó trabajos de rehabilitación y repotenciación. “es una inversión muy grande que se ha hecho en refinería para tener un sistema que no está funcionando como debe”.
Hasta ahora no conocemos de acciones del Estado respecto de las responsabilidades de Worley Parsons, Azul, Phillips y Mónica Hernández.

Proyecto Pascuales Cuenca

El gasoducto Pascuales Cuenca, construido por Odebrecht, tiene como principales beneficiarios a las empresas productoras de cerámicas y acabados, sobre todo ligadas al poderoso grupo Eljuri. Nadie ha justificado la obra, que debió basarse en cantidad de gas natural que se proveniente del campo Amistad y se procesa en la planta de Bajo Alto, que corre el riesgo de colapsar.
El proyecto no contaría con las reservas de gas natural para mantenerlo; tampoco se  ha mencionado el volumen de gas natural que va transportar en el futuro. En esencia se parece al Oleducto de Crudos Pesados, OCP, que fue construido para transportar 450 mil barriles de crudo pero apenas traslada 100 mil.

Petroecuador incumplió la ley al contratar firma de abogados que demandó a Fernando Villavicencio

Fueron ilegales los procesos pre contractuales y contractuales realizados por Petroecuador con el estudio jurídico Vizueta &  Asociados al encargarle la denuncia penal en contra del activista Fernando Villavicencio, por presunto uso doloso de documentos no autorizados para su publicación y falsedad de instrumentos privados, en su libro ‘Ecuador made in China’, donde se advierte sobre varios escándalos de corrupción petrolera. 
Así lo señala el informe de Contraloría DASE 0063-2016, en su examen especial al proceso de contratación suscrito entre la estatal petrolera y Vizueta & Asociados S.A.. 
El organismo de control determina que la mencionada firma de abogados trabajó con Petroecuador en la demanda contra Villavicencio durante 7 meses antes de su contratación. Por lo que en sus conclusiones establece que el ex gerente de la estatal, Marco Calvopiña (hoy en la cárcel por estar involucrado en la mayor trama de corrupción de Petroecuador) quien presentó la denuncia en contra del activista, no cumplió las leyes que rigen la administración pública al permitir que Vizueta & Asociados entregue sus servicios de patrocinio, sin que exista un contrato de por medio. Y se destaca que la contratación, hecha posteriormente, tampoco se justifica debido a que existían suficientes abogados en Petroecuador para encargarse del proceso legal.
En el libro ‘Ecuador made in China’ publicado en enero del 2013, el eje fundamental de las denuncias de Villavicencio apuntó a los negocios de Petroecuador con Petrochina. El activista afirmó que no había preventas petroleras a ese país, sino que eran préstamos que Ecuador recibía a cambio de la entrega de petróleo: “Se prendó el crudo nacional en operaciones de crédito público… Encubrieron (las autoridades) la violación de varias normas relacionadas con el endeudamiento público, en cuanto a autorizaciones y registros se refiere y se transgredió el Art. 130 del Código Orgánico de Planificación y Finanzas Públicas… Se afectó gravemente la capacidad financiera de EP Petroecuador; se permitió pagar directamente deuda externa pública con ingresos petroleros”. Por lo que, según la investigación de Villavicencio, con estas acciones se incumplieron los artículos 315 de la Constitución, 3 y 39 de la Ley Orgánica de Empresas Públicas, así como el Art. 91 Código de Planificación y Finanzas Públicas. 
También denunció a detalle casos como el presunto peculado que se habría causado al Estado por la compra de 240 mil barriles de diesel premiun por parte de Petroecuador a PMI de México, compañía que no tenía ese combustible, pues lo compró a Glencore, una intermediaria descalificada en Ecuador, que además ofertó un precio más alto que las otras oferentes. Esta compra generó un perjuicio de unos $448.800 por el buque, de acuerdo con las estimaciones de Villavicencio. 
Estas y otras revelaciones expuestas en el mencionado libro dieron pie a posteriores publicaciones e investigaciones de medios de comunicación nacionales e internacionales. Y con ello desataron la reacción del anterior Gobierno, especialmente del entonces vicepresidente, Jorge Glas, quien ahora funge el mismo cargo, pero sin funciones, en medio de su creciente involucramiento en el escándalo de corrupción de Odebrecht. 
Glas y el ex secretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, dispusieron a Marco Calvopiña, quien era gerente de Petroecuador, que inicie la acción penal en contra del activista, así consta en el informe de Contraloría.
En efecto,  el 5 de diciembre del 2013 Calvopiña presentó en la Fiscalía General del Estado la denuncia en contra del autor del libro ‘Ecuador made in China’ con el patrocinio del estudio jurídico Vizueta & Asociados “por contener hechos fraudulentos lesivos y dañinos en el que se ha distorsionado la naturaleza de los documentos originales que reposan en los archivos generales de la empresa”. 
Pero esta firma de abogados externos ya estaba en escena dentro de la historia de este polémico caso desde fines de agosto del 2013, pues según la Contraloría, ya venía prestando el servicio de asesoramiento para atender las acciones judiciales que demandaba el tema,  sin que Petroecuador haya contratado sus servicios profesionales.
En 2015 Villavicencio pidió al Contralor que inicie una auditoría a los procesos pre contractual y contractual del citado estudio jurídico. La petición la hizo tras acceder a una proforma de honorarios profesionales que envió Vizueta y Asociados a Petroecuador por $580 mil, el 28 de octubre del 2013, señalando que por pedido del gerente de Petroecuador, ha realizado por casi 60 días el estudio y la preparación legal y procesal por los actos contenidos en el libro ‘Ecuador made in China’, “que lesiona gravemente a la empresa y sus funcionarios… que hay un uso doloso de documentos no autorizados para su publicación y hay también falsedad de instrumentos privados, por lo que es procedente el enjuiciamiento penal del autor del libro”. 
La Contraloría hizo un examen especial, analizando el período desde el primero de enero del 2013 hasta el 16 de marzo del 2016.
El gerente de comercio internacional de Petroecuador presentó a Calvopiña, entonces gerente de Petroecuador, como sustento para la demanda en contra de Villavicencio que éste realiza afirmaciones de ciertas operaciones comerciales realizadas por la petrolera que no están acordes a la realidad y afectan a la imagen de la empresa. Sobre esta base, el 15 de noviembre del 2013 el gerente de asuntos jurídicos de Petroecuador recomienda la contratación de un abogado externo para seguir las acciones legales en contra de Villavicencio y sugiere contratar al estudio jurídico Vizueta y Asociados. El gerente de asuntos jurídicos dijo a la Contraloría que debido al monto de la propuesta original de Vizueta & Asociados también planteó a Calvopiña negociar a la baja ese valor. 
El 15 de enero del 2014 la Fiscalía inicia la indagación por la acusación de Petroecuador hacia Villavicencio por supuestamente haber cometido el delito de uso doloso de documento falso de carácter público, tipificado y sancionado por los Arts. 339 y 341 del Código Penal. 
Para esta fecha Vizueta & Asociados continuaba dando sus servicios de asesoría en las acciones judiciales que implicaba la demanda.
Cuando la Contraloría comunica a Héctor Vizueta Rogasner, gerente de la firma privada, los resultados provisionales de la auditoría sobre la prestación de sus servicios sin que se haya realizado previamente un proceso contractual, la respuesta de Vizueta solo ratifica lo señalado por el organismo de control, al confirmar que “antes de proceder la acción pre-procesal, Vizueta & Asociados efectuó un estudio minucioso de la documentación de los archivos de Petroecuador y la información contenida en la obra “Ecuador made in China”, labor ardua llevada a cabo con funcionarios del área de comercio exterior, archivo general y de administración de Petroecuador”. Vizueta agrega que este trabajo duró aproximadamente 60 días hasta la presentación del informe para revisión de los ejecutivos de la empresa estatal.
Luego de la lectura del borrador de su informe de auditoría, Vizueta sostiene que esta firma de abogados no ha infringido ninguna ley y que “por la complejidad del caso, no podía requerir a Petroecuador la instrumentación de un contrato, mientras no se realizaran los estudios pertinentes a la documentación obtenida, para poder determinar si merecía proseguir con alguna acción penal.”
Pese a estos argumentos, el organismo de control concluye que Calvopiña, entonces gerente de Petroecuador, no observó las leyes que rigen la administración pública, al permitir que el estudio jurídico entregue sus servicios de patrocinio sin contar con un contrato de por medio. Y observa también que en estas condiciones de incumplimiento de las leyes, el ex gerente de la petrolera estatal presentó la denuncia en contra del autor del libro ‘Ecuador maade in China’.
Al cabo de dos meses de iniciada la indagación previa de este caso, Petroecuador recién contaba con los términos de referencia para iniciar la fase pre contractual del patrocinio jurídico de Vizueta & Asociados. El 21 de abril de ese año el jefe de adquisiciones, servicios y consultorías de Petroecuador, adjudica el contrato por $200 mil, bajo el procedimiento de Régimen Especial.
Los argumentos que el subgerente de Patrocinio y admnistrador del contrato dio a la Contraloría para justificar esta adjudicación fue que “dicha firma jurídica por disposición del señor gerente general de la época ya venía trabajando en el tema, tanto con la misma gerencia general cuanto con la gerencia de comercio exterior, por lo cual al realizar el requerimiento de contratación se siguió con esa disposición…”. 
Es decir, se acepta prácticamente que este contrato se asignó a dedo, sin argumentos legales y técnicos.
“No había confianza en abogados de Petroecuador”: así justifica la estatal la contratación de abogados externos
El argumento del subgerente jurídico para explicar la contratación de abogados externos para este caso, pese a contar con profesionales del derecho en la misma empresa estatal, fue que “ a la época de asumir funciones, mediados del 2013… se habían dado circunstancias por demás extrañas, como las de no presentar recursos en casos de cuantías enormes, como el de AKIRA de $49 millones, por lo que no existía la confianza necesaria en el personal, tanto así que de la Presidencia de la República, el Secretario Nacional Jurídico remitió el oficio N° T.1 C.1-SNJ-13-564 del 27 de junio del 2013… mediante el cual se hace notar tales irregularidades; todo esto sumado a la carencia de personal, por lo que se trataba de integrar un equipo de trabajo….ya que el personal existente estaba saturado y no cubría las necesidades de defensa de la empresa”. 
Luego de los informes favorables de la comisión de evaluación de Petroecuador, la Contraloría resalta que el gerente de asuntos jurídicos, al recomendar la contratación de Vizueta &Asociados no cumplió con un proceso de selectividad para la contratación,  con lo que inobservó el artículo 2 de la Ley de Contratación Pública.
Además, este proceso pre contractual inicia bajo la figura de Régimen Especial, pero el jefe de adquisiciones, servicios y consultorías de Petroecuador no argumentó las razones por las cuales se estableció la necesidad de la empresa para acogerse al mencionado Régimen Especial. Por ello, incumplió el numeral 1 del artículo 92 del Reglamento de la Ley  de Contratación pública, según la Contraloría.
De todas formas el contrato Nº 2014082 con Vizueta & Asociados se suscribe el 2 de mayo del 2014, por $200 mil más IVA, es decir 7 meses después de presentada la denuncia en la Fiscalía. El plazo era de aproximadamente tres años y el monto debía pagarse en cinco partes: $60 mil más IVA, a la presentación del informe y de la denuncia en la Fiscalía; $60 mil más IVA, al abrirse la instrucción fiscal; $30 mil más IVA, al dictarse el llamamiento a juicio; $30 mil más IVA, luego de que el Tribunal Penal emita sentencia; y $20 mil más IVA, una vez que exista sentencia ejecutoriada en firme y no se haya presentado recurso extraordinario de protección o si esto se da, una vez resuelto de forma favorable a Petroecuador. 
El mismo día de la firma del contrato Vizueta envía su factura a Petroecuador por $60 mil más IVA por el primer pago, valor que le fue cancelado entre el 21 y el 28 de mayo de 2014.
El proceso de indagación continuó hasta cuando la fiscal del caso, Cecilia Garzón, solicitó al Juez de Garantías Penales de Pichincha la desestimación y el archivo de la denuncia presentada por Calvopiña, al considerar que no hay delito.
En su resolución Garzón derriba todas las imputaciones en contra de Villavicencio. Entre sus principales argumentos explica que “los hechos incorporados en la obra “Ecuador made in China “, corresponden a ideas descritas por el autor y que según la Ley de Propiedad Intelectual (Art. 10) “el derecho de autor protege también la forma de expresión mediante la cual las ideas del autor son descritas, explicadas, ilustradas o incorporadas a las obras”.  Por lo que concluye que  “los hechos denunciados no se adecúan al tipo penal como es el uso doloso de un documento público”.
Agrega que, en su libro, Villavicencio “ha plasmado sus opiniones y críticas a los diferentes gobiernos de turno, para lo cual, si bien es cierto, se tomaron como base convenios, contratos y más documentación de Petroecuador, como empresa pública, no por eso, su obra puede considerarse un documento público, peor aún falso.
Entre los planteamientos de la denuncia de Calvopiña se señalaba que producto de la distorsión de la información del libro, “él (Villavicencio) busca alterar el equilibrio económico y financiero de Petroecuador a nivel nacional e internacional, poniendo en grave riesgo aquellas negociaciones a las cuales está sometida la estatal y lo que es más, divulgando actos irreales de los primeros mandatarios del país, afectando la credibilidad, responsabilidad y honorabilidad de los mismos”. 
Frente a ello la Fiscal explica que, según las pericias practicadas, “los convenios y contratos a los que refiere la denuncia, se encuentran en los archivos de Petroecuador y ya surtieron su efecto legal, por lo que la publicación de esta obra no ha impedido la firma de contratos o convenios y que a consecuencia de esto se haya producido una crisis petrolera y económica tanto de Petroecuador como del país”.
Debido a que gran parte de la información expuesta por Villavicencio en su libro había sido solicitada oficialmente por el ex asambleísta Cléver Jiménez, la Fiscalía General también se pronuncia por el fuero de Corte que entonces tenía el legislador y, en febrero del 2016, señala que la solicitud de información hecha por Jiménez se dio sobre la base de su atribución de fiscalizar los actos del poder público, amparado en el artículo 128 de la Constitución y el 192 del Código Orgánico de la Función Judicial. 
El 5 de abril de 2016 el juez de la Unidad Penal de Pichincha resolvió desestimar y archivar la indagación previa.
Tras el dictamen fiscal y la resolución del mencionado juez, Vizueta & Asociados presentó a ese juzgado más informes sobre el tema, consiguiendo que en el mismo mes de abril del 2016, el juez pida al Fiscal Provincial que delegue la causa a otro fiscal que continúe la investigación. Aunque esto sí se concretó, al final el proceso fue archivado.
A pesar de que nunca se llegó a la etapa de formulación de cargos con la que inicia la instrucción fiscal,  el estudio jurídico Vizueta & Asociados ya desde el 21 de septiembre del 2015 había pedido a Petroecuador el segundo pago pactado en el contrato por $60 mil. Este pago fue negado por el administrador del contrato.  
Para Villavicencio, se evidencia la persecución política en su contra debido al sinnúmero de irregularidades y violaciones a la ley que se cometieron para configurar esa persecución en este caso. 
Vizueta & Asociados y sus contratos con el Gobierno 
El representante legal de este estudio jurídico es Héctor Vizueta Rogasner. Su oficina matriz está en Guayaquil. Inició sus actividades el 6 de febrero de 1997 y está registrado en el SRI con el RUC 0991383727001.
Su relación con empresas de gobierno se evidencia en varias ocasiones. En 2007 esta firma de abogados estuvo en el ojo del huracán. La razón: Una indagación previa iniciada por el fiscal de la Unidad Especial de Delitos Financieros, Abraham Cheing, el 12 de marzo de ese año por el supuesto pago de honorarios al estudio jurídico Vizueta & Asociados S.A. por la defensa de Pacifictel en el caso Nedetel.
Una publicación de diario El Universo, del 20 de marzo del 2007, informa que Carlos Reyes Izquierdo, abogado guayaquileño en libre ejercicio, denunció que “Nedetel salió favorecida en un laudo arbitral que condenaba a Pacifictel a pagar “varios millones de dólares ($ 12 millones), que eso está resuelto en última y definitiva instancia, y que por tanto, no se justifica la contratación del estudio y pagarle $ 300 mil”.
El entonces gobernador del Guayas, Camilo Samán, “quien dijo intervenir en el tema por delegación del presidente de la República, explicó que se contrató al estudio para defender a la empresa con un recurso de nulidad del laudo planteado ante la Corte de Justicia”. Añadió que el directorio de la desaparecida Pacifictel aprobó cancelar al bufete el 10% de anticipo ($30 mil) y el 90% restante, por resultados. Y  que hasta ahora no se ha pagado ni un solo centavo”.
El gerente del estudio jurídico, Héctor Vizueta, declaró a la prensa que mandó una pro forma, como se estila, que es el 2,5% del valor del laudo, pero para defender su integridad resolvieron no cobrar ni el 10%, sino el total cuando obtengan resultados positivos y agregó “el Presidente de la República ha puesto sobre los hombros de nuestro estudio esta tarea”. http://www.eluniverso.com/2007/03/20/0001/9/9A8AF18305604062BD58DC4DF594778B.html
La firma Vizueta & Asociados ha estado relacionada con otras demandas y juicios de Petroecuador, como el caso de Akira. Este bufete de abogados firmó el 9 de septiembre del 2013 un contrato con la estatal petrolera para defenderla en el juicio No. 564-2008-2 y recurso de casación No. 209-2013,  iniciados en su contra por la empresa Akira Internacional. El contrato fue por $300 mil con IVA. http://www4.eppetroecuador.ec/lotaip/pdfs/CONTRATOS/GER/CTR/CONTRAT%20PGER%202013108.pdf
Akira demandó a Petroecuador por haberlo incluido en la lista de contratistas incumplidos y haber retenido un valor consignado por la emisión de las cartas de crédito.
La firma Vizueta & Asociados aparece también en reuniones con funcionarios de la Refinería del Pacífico en marzo del 2016 y recientemente fue contratada por el asambleísta de PAIS, Esteban Albornoz para entablar un juicio penal por calumnias a los miembros de la Comisión Anticorrupción. http://www.fundamedios.org/wp-content/uploads/2016/03/Citaci%C3%B3n-con-la-querella-de-calumnias-Ministro-Albornoz-1.pdf

 

Código de Participación, puñalada final del Correato a la sociedad civil

Embelesada en el diálogo propuesto y en la mano tendida por el presidente Lenín Moreno, la mayoría de ecuatorianos aún no dimensiona el irremediable impacto que tendrá para todo tipo de organización, la aprobación del Proyecto de Código Orgánico del Sistema de Participación Ciudadana y Control Social (COSPCCS).
Líderes de Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) analizaron con MILHOJAS.IS esta propuesta de la asambleísta Johanna Cedeño, del gobernante movimiento Alianza País (AP), y evidenciaron su preocupación, pues la propuesta implicaría elevar al estatus de ley los polémicos decretos 16 y su reforma a través de decreto 739.  
La Corporación Participación Ciudadana y Fundamedios elaboraron la “Guía sobre riesgos de los Decretos 16 y 739 y medidas preventivas de las organizaciones de la sociedad civil frente a los mismos”. En el documento se destaca que los contenidos de estos decretos son coercitivos y sancionadores.
Para Mauricio Alarcón, subdirector de Fundamedios; Rosana Palacios, presidenta de la Unión Nacional de Educadores (UNE), e Isabel Vargas, principal en Pichincha del Frente Popular, varios aspectos y disposiciones del proyecto de Código de Participación Ciudadana, en análisis en la Asamblea Nacional desde el 31 de marzo de 2017, violan el derecho a la libre asociación consagrado en la Carta Política y leyes nacionales, así como en tratados internacionales de los que el Estado ecuatoriano es suscriptor.
Advirtieron que, de ser aprobado, el Código (de 64 páginas y 199 artículos) no solo afectará a oeneges, fundaciones o sindicatos sino incluso a estudiantes, amas de casa, ligas estudiantiles, barriales y demás, cuyo accionar también deberá someterse a la nueva normativa.
“El momento en que un grupo de estudiantes, de amas de casa o de dirigentes comunitarios hagan algo o digan algo que moleste al gobernante de turno o a cualquiera de sus ministros o legisladores, les aplicarán el Código y les amenazarán con sancionarles o cerrarles. Tal como ocurre con la Ley de Comunicación y la prensa independiente. Así de grave es este asunto”, enfatiza Alarcón. 
A mediados de abril, la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), con el auspicio de la Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh), interpuso una acción de protección y una medida cautelar para detener el trámite del proyecto de ley que -según denunciaron- no fue sometido a consulta prelegislativa, redactado, ni socializado con los pueblos y nacionalidades indígenas, como manda la ley. No obstante, la jueza Silvana Velasco negó el pedido pues, según ella, no se evidencia ninguna violación de derechos.
Uno de los temas del proyecto de Código que más preocupa es el concepto de licitud que evidencia dos rasgos fundamentales del Correato: el obsesivo afán de control y el desconocimiento de la dinámica social, caracterizada por la existencia de organizaciones de hecho que, pese a no cumplir requisitos legales como el registro en instituciones estatales, llevan adelante actividades que contribuyen al empoderamiento ciudadano y al desarrollo local, regional y nacional.
El jurista Vladimir Andocilla, del Instituto Ecuatoriano de Derecho Penal e Investigaciones Criminológicas, en un análisis del Proyecto de Ley, identificó otra alerta: el texto pone más trabas a las iniciativas legislativas ciudadanas al establecer nuevos mecanismos que restringen -por ejemplo- la capacidad de proponer leyes y demandar su aprobación. Eso no es todo, también deja su admisibilidad en manos de una comisión de calificación que deberá estar integrada por representantes de las dos fuerzas políticas más votadas, es decir que AP entra seguro, y uno de las minorías.
También dificulta la realización de la consulta popular, pues dispone que dentro del 12% de las personas inscritas en el registro electoral -requisito mínimo para solicitarla- haya inscritos no solo en el padrón nacional sino del exterior.
Y el Correato no podía dejar fuera de esta norma la revocatoria del mandato, trámite de por sí complicado. Mientras la Constitución dispone que la solicitud debe ser respaldada por al menos el 10% del registro electoral, el proyecto de Código crea una tabla que va del 10% al 25% de la población de la circunscripción respectiva.
Este nuevo Frankenstein jurídico es el último golpe del Correato a la sociedad civil, pues fue propuesto dos meses antes de que Rafael Correa deje el poder. Sin embargo, pese a los riesgos que supone para la democracia y el ejercicio de derechos y libertades individuales y colectivas, la reacción social se ha limitado a pocos analistas, entidades y organizaciones no alineadas al régimen.
Alarcón, Vargas y Palacios enfatizan que una respuesta coherente de Moreno sería solicitar el archivo del proyecto de Código Orgánico y derogar los decretos 16 y 739, pues consideran complicado que las OSC puedan seguir operando bajo sus ambiguas normas.
Para Isabel Vargas, lo que se busca con este proyecto es acelerar la disolución de las organizaciones críticas de las políticas del Gobierno, tal como ocurrió con la Fundación Pachamama, disuelta por pedido del Ministerio de Ambiente, y con la UNE a la que, en agosto de 2016, por disposición del entonces ministro de Educación Augusto Espinosa -hoy asambleísta de AP y presidente de la Comisión de Educación- se le quitó la personería jurídica.
Esta problemática pone al nuevo mandatario contra las cuerdas y le obliga a trazar un parteaguas en la historia del Ecuador para demostrar coherencia entre su discurso y su accionar. 
¿Podrá Lenín Moreno archivar el proyecto, derogar los decretos y poner fin a 10 años de criminalización de la protesta social?
Alarcón, Vargas y Palacios coinciden en que si Moreno da oídos sordos a estos pedidos, además de terminar de asestar la puñalada a la participación ciudadana, dejará en evidencia que su apertura al diálogo no pasa de ser una estrategia política engañosa.

Rosana Palacios: “Si aprueba el Código Orgánico, Alianza País firmará la sentencia de muerte de toda forma de organización social”.

¿En el plano internacional, qué resultados destaca de las acciones emprendidas para restablecer el derecho a la libre asociación, violentado por los Decretos 16 y 739?
El Estado ecuatoriano ha sido convocado por varias ocasiones a instancias internacionales, no solo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sino del Sistema Interamericano de Derechos Humanos para el examen periódico universal, luego de varias recomendaciones planteadas tras la aprobación del Decreto Ejecutivo 16 en junio de 2013. Rafael Correa lo firmó con el pretexto de hacer un registro de las organizaciones sociales, debido a que, de 98.000, apenas 18.000  tenían personería jurídica. Tras cuatro años de vigencia del D16,  eso no ha cambiado y prueba que lo que en realidad Correa buscaba  era instaurar un mecanismo de control de nuestras organizaciones. Para noviembre, Lenín Moreno debe presentar una memoria de sus acciones en esta materia en la reunión anual de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Vamos a ver con qué sale.
¿Qué recomendaciones hicieron los organismos internacionales?
Desde el 2010, la OIT ha expresado su preocupación y ha hecho recomendaciones sobre la libertad de asociación, de sindicalización, de expresión y sobre la independencia de la justicia. Recordemos que la OIT, que es única en el mundo sobre gobernanza tripartita, ha advertido sobre la violación del Convenio Internacional, que tiene categoría constitucional en el Ecuador. En el  lenguaje diplomático de la OIT, decir que están preocupados es porque hay una violación sistemática de la libertad de asociación y de contratación colectiva, que son derechos fundamentales de los trabajadores en el mundo. Delegados de estados como Suiza y Canadá y de Estados Unidos han advertido esta situación en las conferencias de la OIT, lo que para nosotros es una vergüenza y muestra de la mediocridad de nuestras autoridades que no han tenido la capacidad para responder a esas recomendaciones.
¿Qué otros países han sido observados por la OIT?
El Salvador y Honduras son dos de los que tienen doble pie de página junto con Ecuador. Eso quiere decir que tiene un asterisco que muestra una elevada preocupación debido a que el gobernante no responde. Es vergonzoso que asambleístas fanáticos de Correa, como Marcela Aguiñaga, digan que no responden porque tenemos soberanía y autonomía. Eso es mediocridad y manejar un doble discurso y una doble moral. 
¿En el día a día, cómo afecta que Ecuador tenga el estatus de un país que no respeta los derechos de libre asociación y de expresión?
Es lamentable pero en nuestro país las libertades públicas y los derechos de asociación o de expresión no son concebidos por la opinión pública y los sectores populares como parte de su vida cotidiana. Son vistos como una concesión del gobernante de turno. Eso complica el empoderamiento social e inmoviliza a los ciudadanos.
¿Tienen una estrategia para revertir esa indiferencia social?
Estamos trabajando con organizaciones dedicadas a la defensa de los derechos humanos, con personalidades como Martha Roldós y organizaciones como la UNE, el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) y Fundamedios, con las que hemos conformado una plataforma de Derechos Humanos y Democracia. Hemos hecho una serie de investigaciones para promover el empoderamiento. Un primer resultado es la lucha desde el  FUT para lograr la derogatoria de los decretos 16 y 739. También exigiremos el archivo del Proyecto de Código Orgánico de Participación. Es hora de que el Gobierno de Lenín Moreno acoja las recomendaciones de organismos internacionales que advierten que un decreto ejecutivo no puede estar sobre la ley, sobre la Constitución ni sobre los convenios internacionales.
¿Cuál es el riesgo si el Gobierno continúa la hoja de ruta marcada por Rafael Correa?
Si se aprueba el Código Orgánico, que hábilmente Correa logró que lo proponga Johana Cedeño, una de sus fanáticas seguidoras, Alianza País firmará la sentencia de muerte para toda forma de organización social. El oficialismo pretende hacer creer que peleamos por intereses gremiales, por la UNE o Pachamama, cuando en verdad conculca el derecho a la libertad de asociación. Agotaremos todas las instancias hasta llegar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Algo importante que el Gobierno de Moreno debe tener en cuenta es que acaban de firmar el acuerdo comercial con la Unión Europea, para la que es clave la tranquilidad en las organizaciones sociales y sindicales.
¿Qué plantea el acuerdo con la UE?
El respeto a la libertad de asociación. Por eso, en junio pasado en Ginebra, el delegado de la UE instó a la representación ecuatoriana conformada por delegados del Ministerio del Trabajo, a respetar la libertad de asociación. La represión ha sido una característica del Gobierno de Correa, pero hay que estar atentos porque la conciliación, el diálogo y la mano extendida pueden resultar más peligrosos si no se traducen en cambios efectivos.
¿Teme que eso ocurra con Lenín Moreno? 
Claro, ya lleva más de dos meses su gobierno y no hay claridad sobre estos temas. De tener la voluntad política, el diálogo debe ser con todos. Nosotros hemos tenido acercamientos con voceros como el prefecto de Pichincha Gustavo Baroja, pero nada en concreto logramos aún. Ya es hora de que por lo menos nos reciba para analizar la situación de la UNE, de Pachamama y discutir la problemática de la educación y de los polémicos decretos 16 y 739. Si eso no se da, nos corresponderá entonces retomar las estrategias de movilización y protesta.
¿Es una advertencia para Moreno?
Si los docentes no recuperamos la vida jurídica de nuestro sindicato, venceremos el temor y reclamaremos. Atravesamos una crisis de abandono en la educación, de violación de derechos, estamos en el desempleo, el pueblo reaccionará si no hay soluciones. Lenín  Moreno debe tener claro que le toca amainar al movimiento social. En el 2015,  el propio Rafael Correa cedió ante las movilizaciones y, a la fuerza, pero dialogó. En este mes de agosto junto con la Comisión Anticorrupción vamos a realizar una convención de las organizaciones sociales, en Guayaquil, que busca  generar propuestas para salir de las crisis. Para entonces esperamos un pronunciamiento claro del Presidente.

Mauricio Alarcón: “Lo que más preocupa es la falta de conocimiento de la propia sociedad civil respecto de esta amenaza”

 

¿El Proyecto de Código Orgánico del Sistema de Participación Ciudadana y Control Social es una puñalada mortal para las organizaciones sociales?
No es solo eso, hay dos proyectos en debate en la Comisión de Participación de la Asamblea. El uno, propuesto por legisladores de Alianza País (AP), es una propuesta de ley orgánica que plantea la extinción de personas jurídicas vinculadas a fundaciones y organizaciones sociales. Este tiene algunas falencias, pero es un mejor proyecto de ley, mientras que el proyecto de Código Orgánico es más peligroso porque no solo se enfoca en el trabajo de las organizaciones, sino que apunta incluso a la estatización de la participación ciudadana y del control social, que son derechos constitucionales que los puede ejercer cualquier ciudadano de manera libre.
¿De qué manera se coarta su libre ejercicio?
Nosotros sostenemos que los derechos fundamentales se deben regular a través de una ley orgánica, como dice la Constitución. Al elevar a categoría de ley los Decretos 16 y 739, lo que buscan es quitarnos un argumento.
De cualquier forma, ¿lo que se busca es implantar mayores controles sobre la sociedad civil?
Exactamente. El código es para tener mucho más controlada a la sociedad civil.
La sociedad civil somos todos: niños, jóvenes, adultos, profesores, estudiantes, trabajadores, profesionales, empresarios, mujeres, indígenas. ¿Por qué no hay una reacción generalizada si están en riesgo sus derechos y libertades?
Ese punto es muy interesante. Debemos entender que la sociedad civil no son solamente las fundaciones y corporaciones sino el Comité de Padres de Familia de un colegio; la sociedad civil es el equipo de fútbol de un barrio, el comité de mejoras de un barrio… Quieren controlar toda forma de participación.
¿Eso evidencia etemor del partido gobernante a la reacción social en época de crisis? ¿El Código es un blindaje?
Es posible porque la propuesta nace de un grupo de asambleístas del partido de un gobierno que durante los últimos 10 años ha utilizado un sistema de premio-castigo con las organizaciones sociales. Si son afines, no solo les dan recursos sino que les dejan hacer lo que les da la gana. Incluso les permiten participar en actos de proselitismo político. En tanto, a quienes cuestionamos las políticas restrictivas de derechos y libertades nos amenazan con el cierre, como ocurrió con Fundamedios. Más radicales fueron con la Fundación Pachamama a la que clausuraron por oponerse a la explotación del Yasuní y con la UNE a la que le arrebataron su personería jurídica.
El Gobierno argumenta que las acciones contra Fundamedios, Pachamama, la UNE y otras organizaciones se deben a que no han cumplido la ley.
Son normas y medidas que responden a resentimientos, a taras y temores del gobierno de Rafael Correa.
¿Por qué la ciudadanía no ha dimensionado el impacto de los Decretos 16 y 739 y, si llegara a ser aprobado, del Código de Participación Ciudadana?
Porque la gente no conoce el tema y piensa que no le afecta, que no es cosa suya. Pocos ciudadanos se involucran en el trabajo legislativo y pocos entienden la dinámica de la sociedad civil y su importancia en un sistema democrático. El momento en que la ciudadanía entienda que con este proyecto de ley se pretende regular hasta a los grupos barriales, probablemente reaccione y cuestione. Ojalá no sea demasiado tarde.
¿Fundamedios y otras organizaciones tienen un análisis sobre el impacto de los Decretos 16 y 739, cuántas oeneges han sido cerradas o han desaparecido desde su aprobación en 2013?
El debate público se ha centrado en los casos de Pachamama, la UNE, Fundamedios y Acción Ecológica pero, con datos de los propios ministerios, descubrimos que hay decenas de organizaciones disueltas por la autoridad y auto disueltas. En este país se puede crear una compañía en pocos días y con 400 dólares de capital, mientras crear una fundación toma meses y se necesita 4.000 dólares. Una compañía designa gerente, e inscribe su nombramiento y listo, pero cuando una oenege elige directiva la someten a una serie de trámites burocráticos, cambios y preguntas absurdas. ¿Acaso somos Satanás?
¿Cuál es la solución?
Sería bueno, por ejemplo, que a las organizaciones de la sociedad civil nos asimilen como personas jurídicas sin fines de lucro para que nos diferencien de las compañías, y punto. Sería bueno que agiliten el trámite de constitución y lo reduzcan a pocos días. No pedimos operar fuera de la ley, pero es indispensable mejorar las condiciones y garantizar, de verdad, la participación ciudadana, para que deje de ser un membrete propagandístico.
Uno de los argumentos para defender los decretos 16, 739 y el proyecto de Código de Participación es la necesidad de regularizar a las OSC, pues de unas 90 mil que habría en el país, menos del 10% operan legalmente.
Eso es parte de la realidad mundial. El gobierno no puede desconocer la dinámica social. Es más, vendió su proyecto político promoviendo la participación ciudadana, pero en la práctica hizo lo contrario. Es incomprensible ver cómo funcionarios del Gobierno de Rafael Correa, que provienen de la sociedad civil, han satanizado a las organizaciones.
¿A quiénes se refiere?
Por ejemplo a Omar Simon, exsecretario particular de Correa y expresidente del Consejo Nacional Electoral (CNE). Él se formó en Participación Ciudanana, organización de la sociedad civil que recibió fondos de Estados Unidos. Otro ejemplo es el de Gustavo Jalkh, también exsecretario de Correa, exministro de Justicia y presidente del Consejo de la Judicatura. ¿Acaso su proyecto ProJusticia no fue financiado con fondos de la USAID? Estos son apenas unos pocos casos, hay decenas de personajes del Gobierno. Eso se llama hipocresía y actuar contra la sociedad a la que dicen defender.
¿Es hora de que Lenín Moreno pase del diálogo a medidas que demuestren un cambio real, o hay que darle más tiempo?
El diálogo tiene que ser concretado en acciones, no es cuestión de pasarnos la vida dialogando sin resultados.
¿Hay algún acercamiento con el Gobierno para analizar estos temas?
Respecto a la normativa de la sociedad civil se ha mencionado algo, pero formalmente no ha habido un diálogo. Esperamos que en los próximos días haya apertura en el Ejecutivo y en la Comisión de Participación Ciudadana de la Asamblea, en cuyas manos está el proceso de aprobación del código.
¿Qué pasó con la demanda de inconstitucionalidad que Fudamedios presentó contra el Decreto 16?
No espero nada de la Corte Constitucional. En agosto del 2013, en cuanto entró en vigencia el Decreto 16, presentamos la demanda. Hace pocas semanas empezó a tramitarse, es decir cuatro años después. Otras organizaciones han presentado acciones de inconstitucionalidad contra el Decreto 739, pero no creo que pase nada. Más bien es posible que sean elevados a ley, si la mayoría gobiernista aprueba el Código Orgánico.
¿El Código es una sentencia de muerte  de las organizaciones de la sociedad civil?
Más que hablar de acta de defunción o sentencia de muerte, ese código será la principal herramienta contra la sociedad civil, similar a lo que ocurre con la Ley de Comunicación contra los medios independientes, que se aplica al antojo del gobernante o la autoridad de turno para librarse de las voces críticas, de quienes les resultan incómodos. Al elevar a categoría de ley orgánica esos decretos restrictivos, simplemente terminarán de ahorcarnos.
¿Qué están haciendo para ser escuchadas?
Presentimos que pocas organizaciones se han dado cuenta de la gravedad del asunto, pocas organizaciones conocen, están informadas y tratan de hacer algo. No he sabido de acciones con la misma fuerza de las que se realizaron cuando fueron aprobados los decretos 16 y 739.
¿Qué expectativa tiene de que el presidente Moreno apoye el archivo del proyecto y la derogatoria de los decretos?
Si Alianza País le falla una vez más a la sociedad y aprueba el Código, esperamos que el presidente Moreno vete esa norma que contradice la Constitución, las leyes nacionales y estándares internacionales que garantizan el pleno ejercicio del derecho a asociarse libremente para fines lícitos. Espero que pasemos del diálogo y el discurso romántico a las acciones concretas.
¿Si eso no ocurre, el código puede llevar a la gente a organizarse y a trabajar desde la clandestinidad, como en una dictadura?
Ese es el riego y sería nefasto para un país que pregona la democracia plena. Las organizaciones jurídicas y las de hecho tienen derecho a funcionar en paz y, si cometen actos ilegales, deben ser sometidas a la normativa penal vigente, que es suficiente para sancionarlas. Eso es lo lógico en un Estado de derecho, nadie quiere operar al margen de la ley.
¿En el plano internacional, cómo afecta a la imagen del país estos decretos y la posibilidad de que se apruebe el Código Orgánico?
Por este tipo de leyes y decretos Ecuador tiene llamados de atención en la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. A Lenín Moreno le toca, en noviembre próximo, en la reunión anual de la OIT, definir con claridad hacia dónde van sus políticas en esta materia. Y la primera señal nos preocupa porque el Gobierno no envió un representante al período de audiencias realizado en Perú hace pocos días.
 ¿Qué funcionario o institución son los directamente responsables de enviar delegados?
Eso le corresponde al Presidente de la República como principal garante de los derechos fundamentales, él es la cabeza del Estado y el principal responsable que debe velar porque los derechos se respeten. Por lo menos es un grave descuido que hasta el momento no ha sido explicado ni aclarado por ningún funcionario de este Gobierno.
¿Cree en el diálogo promovido por el Jefe de Estado?
Hasta el momento nos están endulzando con caramelitos; sin embargo, quiero ser positivo y espero que haya un cambio real. No podemos los ecuatorianos conformarnos con ofrecimientos cuando de lo que se trata es de recuperar nuestras libertades.
¿Ve avances en ese sentido?
En el tema de comunicación el diálogo está abierto, han ido periodistas a reunirse con el Presidente. Esperemos que el diálogo se abra al tema de las organizaciones, tiene que ser en varios frentes. Es de esperar que la Secretaría de Gestión de la Política, que lidera el diálogo, si se quiere actuar responsablemente, sugiera al presiente Moreno que derogue los decretos 16 y 739 y promueva una ley orgánica que garantice la libertad de asociación.
¿De no dar paso a esos cambios, cuál es el escenario para la sociedad civil?
Aunque quiero ser optimista y mantener la esperanza, me preocupa la inacción oficial porque, en cuestión de derechos, un día cuenta. Hay acciones urgentes que debieron haber tomado en los primeros días si es que hay un compromiso real con los ciudadanos. Lo que más me preocupa es la falta de conocimiento de la propia sociedad civil respecto de estas amenazas. 

Isabel Vargas: “Si Moreno no cumple, será el Caballo de Troya que ofrece la paz, pero en realidad mantiene la represión del Correismo”

¿Qué derechos se ven afectados por el Código de Participación?
Se coarta la libertad sindical puesto que se establece como causal de disolución de una organización alterar el orden público, algo que ha sido manejado discrecionalmente durante estos 10 años de Correismo. Justamente, la Unión Nacional de Educadores (UNE) y la Fundación Pachamama fueron disueltas con el Decreto 739, que contradice el Convenio 87 de la OIT firmado y ratificado por el Ecuador. Nosotros acogemos la apertura de Lenín Moreno y esperamos que escuche las demandas de las organizaciones  sociales.
¿Han tenido alguna respuesta del Ejecutivo u otra instancia gubernamental?
Aún no. Esperamos que nos inviten a dialogar para exigir que la reforma incluya, por ejemplo, mecanismos para que el Consejo de Participación Ciudadana investigue y denuncie los actos de corrupción, algo que no ha hecho en estos 10 años. Las veedurías ciudadanas no han servido para sancionar a los responsables de la corrupción. Al contrario, en el caso de los contratos de Fabricio Correa, hermano del expresidente, los veedores llevan años siendo perseguidos por el Gobierno. Tenemos el caso de otra veeduría que investigó el proceso de recategorización. Tres veedores determinaron un perjuicio de más de 200 millones de dólares a los maestros. Cada profesor que optó por la recategorización habría perdido alrededor de 7.000 dólares debido a la mala aplicación. Al respecto nada han hecho el Ministerio de Educación, la Asamblea ni la Justicia. El pueblo sigue siendo perjudicado porque este llamado Quinto Poder se centró en servir a los intereses del Gobierno de Correa y es una herramienta más para la criminalización de la lucha social.
¿En términos prácticos, si el Gobierno no da paso a esas demandas, cómo afectaría la vida de todos los ciudadanos? 
El Decreto 16 exige que las organizaciones sociales de hecho tengan personería jurídica. Eso significa que casi todas serían ilícitas. Los estudiantes secundarios tampoco tendrían derecho a organizarse porque para tener una personería jurídica necesita ser mayor de edad. Se está coartando ese derecho. El caótico trámite también ha impedido que la Federación de Barrios de Quito inscriba a su directiva y podría correr la misma suerte de la UNE, a la que le quitaron la personería jurídica. Es preocupante esta situación.
¿El objetivo es desmovilizar a la ciudadanía, quitarle su derecho a protestar y a cuestionar al poder político?
Ese es el objetivo. Para ello han introducido conceptos tan regresivos y ambiguos como la afectación de la paz social si hay una protesta. Eso es legislar de espaldas al pueblo. 
Desde el 24 de mayo se respira un ambiente menos tenso con Lenín Moreno, hay diálogo con diversos sectores, pero estructuralmente nada ha cambiado todavía. ¿En ese contexto, lo que ocurra con los decretos 16 y 739 y el Código de Participación será crucial para pasar del dicho al hecho en lo que a la sociedad civil se refiere?
Lenín Moreno ha tendido su mano pero, hasta el momento, parece que solo le esta funcionado la mano derecha. Vamos a estar vigilantes de lo que haga, pero no nos agrada que diga que Correa no le ha dejado la mesa tendida sino deudas y deudas, pese a lo cual mantiene a los mismos funcionarios de hace 10 años. Si Moreno no cumple, se convertirá en el Caballo de Troya que ofrece la paz y en realidad mantiene la represión del Correismo.
¿Es posible que la UNE recupere su personería jurídica?
La Unión Nacional de Educadores nació con el voto de sus miembros, pero fue anulada de manera autoritaria e ilegal por el Gobierno de Correa que fomentó el paralelismo y creó, en las faldas de Carondelet y con dirigentes escogidos a dedo, un movimiento paralelo, violentando convenios internacionales y la Constitución.  A los maestros que no nos hemos alineamos al régimen, nos han quitado la carga horaria, nos han perseguido. Sin embargo, tenemos la esperanza de que la UNE, que es una organización legal, recupere ese estatus, que es reconocido hasta ahora por la OIT.
¿En tanto la UNE sigue operando?
Nos mantenemos como una organización de hecho. El proceso de disolución estuvo cargado de irregularidades, de ilegalidades. El asalto a los edificios se hizo sin orden de un juez. Eso tiene que ser revisado.
¿Eso exigen del Gobierno de Lenín Moreno?
Claro, y también lo ha hecho la OIT. El año anterior hizo una recomendación sobre la libertad de asociación; este año fue más directa y pidió por escrito que se le devuelva la personería jurídica a la UNE.
¿Confían en que el ministro de Educación Fander Falconí acoja esa sugerencia?
Fander Falconí es uno de los ideólogos del proceso anterior. Queremos hablar directamente con Lenín Moreno pues, como presidente, es él quien debe dar las directrices para resolver la situación.
¿Dónde se reúnen, cómo han logrado mantener activa a la UNE?
Los gremios de trabajadores nos prestan sus oficinas para reunirnos, nuestros maestros vienen con temor, se cuidan de las fotos porque temen salir públicamente, pero en este nuevo momento están menos temerosos. Esperamos que los 73 años de lucha de nuestra organización sean reconocidos por el Gobierno. No solo hemos protagonizado paros y huelgas, también hemos peleado por la calidad de la educación, por el laicismo y la gratuidad. Por lo tanto, no hemos liderado una lucha reivindicativa solo de los derechos de los maestros. 
¿Han fijado un plazo para que el Gobierno acoja sus demandas?
Pedimos una audiencia con Lenín Moreno,  estamos esperando su respuesta. Hace tres semanas presentamos al Ministro de Educación la resolución OIT en la que se solicita la restitución de la personería jurídica de la UNE. Todavía no tenemos respuesta de Fander Falconí. Mantendremos la presión desde las bases.

Entrevista Exclusiva. Moro: Hay que investigar a las empresas locales, no solo a las brasileñas en caso Lava Jato

Por Investiga Lava Jato y Convoca /Traducción: Milagros Salazar / Foto: Folha de Sao Paulo
Estado de Paraná, Curitiba.
− Hace menos de tres semanas, el juez Sergio Moro publicó una sentencia que dio la vuelta al mundo como parte del monumental caso de corrupción Lava Jato: la condena de nueve años y seis meses de cárcel por corrupción y blanqueo de dinero a Luiz Inácio Lula da Silva, el primer expresidente de Brasil condenado por corrupción.
Esta vez, el célebre juez del caso Lava Jato que no suele declarar para la prensa, abrió las puertas de su oficina en Curitiba, Brasil, para conversar en exclusiva luego de su histórica sentencia a Lula, con los periodistas de ‘Investiga Lava Jato’, proyecto colaborativo coordinado por Convoca y Folha de Sao Paulo, con la participación de reporteros de medios y organizaciones de periodismo de investigación de 11 países de América Latina y África.
“Esta entrevista es una forma de incentivar el trabajo de periodistas investigativos. Creo que es loable el trabajo conjunto y cooperativo entre periodistas de varios países, sobre temas universales que interesan en forma particular a América Latina”, aseguró Moro al inicio de este diálogo que se prolongó durante casi dos horas y en el que participaron los periodistas Flávio Ferreira y Estelita Hass Carazzai, del diario Folha de Sao Paulo; Raúl Olmos, de Mexicanos contra la Corrupción; Milagros Salazar, del portal de periodismo de investigación Convoca, de Perú; Adérito Caldeira, del Jornal Verdade de Mozambique; Lisseth Boon, de El Pitazo de Venezuela; Emilia Delfino, del diario Perfil de Argentina y los periodistas de ColombiaCheck.
En esta entrevista, Moro habla sobre los retos de la investigación Lava Jato en Perú, México y otros países del continente donde las empresas brasileñas pagaron coimas millonarias para adjudicarse obras y financiaron campañas electorales de manera ilegal.
También hizo hincapié en el papel que jugaron las empresas nacionales en cada país donde se impuso la coima como parte del sistema de corrupción, no solo en manos de las constructoras brasileñas.
Para Moro "el derecho no es una ciencia exacta” pero hay principios fundamentales que deben respetarse para llegar a la verdad y garantizar la justicia. Aquí publicamos la primera parte de este amplio diálogo.
Flávio Ferreira (Folha de Sao Paulo): Hay sentencias en Lava Jato que no se basan solo en documentos sino también en otros tipos de pruebas. Un ejemplo es la condena del expresidente Lula, que en su fundamentación apunta que los beneficios concedidos al expresidente tienen como "única explicación" la corrupción en Petrobras. ¿Cuál es su opinión sobre el uso de presunciones de este tipo en casos complejos?
Sobre el expresidente, todo lo que yo quería decir ya está en la sentencia. Teóricamente, en cualquier proceso penal, se tiene un conjunto de pruebas, y el juez decide en base a este conjunto. Una clasificación que se hace dentro del proceso penal es la prueba directa y la prueba indirecta, que constituye la prueba indiciaria. Para dar un ejemplo clásico: usted tiene un testimonio que vio un homicidio. Es una prueba directa.


Una prueba indirecta es alguien que no vio el homicidio pero vio a alguien dejando el local del crimen con un arma de juego. Esa persona no presenció directamente el hecho, pero vio un hecho del cual se infiere que un sospechoso es culpable. El juez va a evaluar todas las pruebas que existen, sean directas o indirectas, y va a preferir un juzgado. No hay un proceso en el que sólo exista un tipo de prueba, es un conjunto de pruebas. No es nada extraordinario en relación a lo que sucede cotidianamente con cualquier caso criminal. (…)
Estelita Hass Carazzai (Folha de Sao Paulo): Ese tipo de decisión sobre beneficios a reos, pruebas indiciarias, prisiones preventivas, ¿no forman parte de una inflexión que Lava Jato está trayendo al derecho penal
No, de ninguna forma. Lo que Lava Jato revela es que la impunidad en crímenes de corrupción en Brasil no es más una regla. La corrupción siempre va a existir. Pero se espera que, con el fin de la impunidad, disminuya. Lo importante es que la impunidad no sea más una regla para este tipo de criminalidad tan dañina para la economía, los recursos públicos y la propia democracia.
Flávio Ferreira (Folha de Sao Paulo): En algunas sentencias, usted comentó sobre la divulgación de las escuchas que envolvieron a los expresidentes Lula y Dilma Rousseff, que el problema fue el contenido que revelaba intentos de obstruir las investigaciones con gran poder político. ¿La divulgación de ese contenido que usted hizo tenía como objetivo proteger Lava Jato?
La elección que se adoptó desde el inicio del proceso, a partir del momento en que eso no era perjudicial en las investigaciones, era hacer todo público. Dar más publicidad a las acciones penales, las pruebas, el juicio. Primero, porque la Constitución brasileña así lo determina: el juicio tiene que ser público. Segundo, porque forma parte de las libertades democráticas que las personas tengan conocimiento de que lo que hacen sus gobernantes. Si tenemos procesos que envuelven delitos de corrupción, que básicamente es el abuso del poder para el beneficio privado, nosotros comprendimos desde el inicio que era necesario la publicación.
Un efecto indirecto de la publicación de esos casos fue proteger las investigaciones contra las interferencias indebidas. Al final de cuentas, son procesos que envuelven personas poderosas, política y económicamente. Claro que la ley no permite que haya obstrucción, pero en la práctica puede haber tentativas. Entonces, hacer todo público también acaba funcionando como una especie de protección contra cualquier obstrucción de justicia. Creo que eso es muy importante. Dentro de una democracia liberal como la nuestra, es obligatorio que esas cosas salgan a la luz pública.
Flávio Ferreira (Folha de Sao Paulo): En Lava Jato, hay más de 150 acuerdos de delación premiada y muchos de los colaboradores van a permanecer presos por dos o tres años. De ahí ellos van a volver a las calles. ¿Cuándo eso sucede, no puede emerger en un futuro próximo, una sensación de impunidad, de que el crimen compensa?
La colaboración de los criminales viene con un precio: no colaboran sino es por la obtención de un beneficio. Eso forma parte de la naturaleza de la colaboración. Mucha gente no tiene ningún acuerdo y continúa respondiendo a los procesos, algunos fueron condenados, están presos. Esas personas también van a salir de la prisión algún día. Es parte del sistema. Lo que yo creo es que tiene que ser comparado que, en el pasado, como regla lo que había era la impunidad. Las personas ni siquiera sufrían las consecuencias de sus actos criminales. En muchos casos, ellas ni siquiera eran descubiertas. La sensación de impunidad era todavía mayor. Aunque las personas tal vez no sabían detalles, tenían una noción de que sucedía dentro de los gabinetes de algunos agentes públicos.
Raúl Olmos (Mexicanos contra la Corrupción): En México estamos muy preocupados porque no hay ningún efecto, ninguna acción visible en el caso Lava Jato. ¿Cuál es su opinión sobre un país donde la corrupción está muy arraigada y pareciera que no ocurre nada mientras que en otros países hay un sismo político?
Es difícil evaluar lo que ocurre en otros países, no tengo detalles de todo. La globalización también termina ocasionando un fenómeno de transnacionalización del crimen. De hecho, fue constatado que las empresas brasileñas eventualmente pagaron ventajas indebidas, o coima, para autoridades públicas en otros países. Si el crimen es transnacional, el enfrentamiento de la criminalidad también tiene que ser transnacional, y tiene que envolver mecanismos de cooperación. Las autoridades brasileñas, como regla, han estado dispuestas a compartir esas pruebas. Cabe a los otros países intentar extraer de ellas lo mejor, estableciendo sus propias investigaciones y responsabilizando a los eventuales culpables si son identificados. Al final de cuentas, el enfrentamiento del crimen es una demanda universal, un deseo universal.


Tengo la expectativa que también las autoridades de México puedan desarrollar bien los casos criminales, utilizando esas pruebas compartidas o realizando sus propias investigaciones. No es absolutamente necesario que los casos dependan solamente de las pruebas que las autoridades brasileñas compartieron. Ellas (las autoridades) pueden desarrollar mucho más con un trabajo de investigación a partir de eso (las pruebas de Brasil).
Raúl Olmos (Mexicanos contra la Corrupción): El caso Odebrecht tocó a diversos países a través del financiamiento de campañas políticas. Sin que diga nombres o cite casos concretos, ¿hay evidencias de que esto haya ocurrido también en México?
No tengo detalles para que yo pueda hacer un comentario específico al respecto, y también no sé cómo andan las investigaciones allá. Lo que sé es lo que ya está publicado. En el ámbito del acuerdo de la colaboración de Odebrecht, fueron revelados diversos casos de soborno y corrupción en los que están envueltos otros países, tanto en América Latina y África. La intención de las autoridades brasileñas es compartir esas pruebas. Hasta había un deseo de que Odebrecht hiciera acuerdos específicos en otros países porque así, la compañía también resolvería la situación jurídica en esos países y proporcionaría las pruebas directamente a ellos.
Milagros Salazar (Convoca, Perú): A estas alturas de la investigación Lava Jato, ya es posible decir que la empresa Odebrecht financiaba las campañas electorales de los candidatos que encabezaban las encuestas no solo en Brasil, sino también en Perú, México y otros países donde la empresa pagó sobornos. Quisiera saber si usted como juez del caso y con acceso directo a la información, puede confirmar que esa era una práctica común como parte del esquema de corrupción ejecutado por Odebrecht en América Latina.
Considerando los casos ya juzgados, lo que se puede decir es que hay situaciones en las que las empresas brasileñas cometieron actos de corrupción y pagaron coimas a políticos mediante donaciones electorales. Eso sucedía tanto en donaciones informales, o sea, ilegales, no registradas, como eventualmente en donaciones legales o registradas. Entre las empresas investigadas en este caso, está Odebrecht. Ellos mismos ya admitieron públicamente en los interrogatorios que desviaban montos de sobornos mediante donaciones electorales declaradas y no declaradas. Entonces, es una forma de cometer ese crimen.
Milagros Salazar (Convoca, Perú) En las planillas de la División de Operaciones Estructuradas de Odebrecht, hay montos de dinero vinculados a campañas electorales, por ejemplo el financiamiento a la campaña electoral del expresidente Ollanta Humala que hoy está con prisión preventiva. ¿Se puede decir que todos los montos que aparecían en las planillas de este Sector iban destinados al pago de coimas y al financiamiento de campañas electorales que se hicieron en forma ilegal?, ¿es irrefutable concluir eso?
No reportaría ningún caso específico. No conozco los detalles que envolvieron al expresidente de Perú, por ejemplo. Lo que sucede es lo siguiente: en el transcurso de las investigaciones se descubrió este sector específico de Odebrecht dedicado al pago de montos que no formaban parte de la contabilidad oficial de la empresa. Parte de esos pagos eran sobornos. Por ejemplo, Odebrecht pagó millones de dólares en cuentas del exterior a directores de Petrobras por contratos de la compañía estatal. No se puede decir que todos los pagos de esa contabilidad informal son necesariamente de corrupción o sobornos. Hay que analizar caso por caso. Ahora, normalmente esos pagos, incluso por no formar parte de la contabilidad de la empresa, están envueltos en algún ilícito. Son ilegales. Si son o no corrupción, si hay una contrapartida específica a un agente público, es algo que necesita ser profundizado en la investigación.
Milagros Salazar (Convoca, Perú): En Perú se cuestiona que los expresidentes considerados políticamente más débiles son los que están enfrentando la justicia como Alejandro Toledo y Ollanta Humala, y que no necesariamente se está investigando con la misma profundidad a otros expresidentes o excandidatos presidenciales como Keiko Fujimori. Cuando la justicia tiene información importante de diversos exmandatarios y candidatos presidenciales, ¿por dónde se debe empezar a investigar? Hay una demanda de los ciudadanos de que todos deben ser tratados por igual (…) y hay la sensación de que a algunos se les investiga y a otros no.
No tengo condiciones de evaluar el trabajo de la justicia y el Ministerio Público de Perú. Uno, por la distancia, y dos, porque también no sería apropiado. Yo estuve, no obstante, recientemente en el país, invitado por una asociación de magistrados. Tuve la oportunidad de conocer a varios magistrados y miembros del Ministerio Público, y me pareció que había un deseo muy profundo por parte de ellos de indagar esos hechos y llevar esos casos a la justicia, que espero que suceda.


Aquí en Brasil, a veces, una crítica muy equivocada, de que la justicia estaría actuando de manera selectiva, siendo más dura en relación a determinadas agrupaciones partidarias o a políticos de determinado perfil que en relación a otros. Una crítica muy similar fue hecha a la Operación Manos Limpias, en Italia. El trabajo de los magistrados acabó alcanzando más fuertemente la democracia cristiana y el Partido Socialista Italiano, y se criticaba a los magistrados diciendo que estaban protegiendo a miembros del Partido Comunista.
Pero allá como aquí, las investigaciones y los procesos se llevan a cabo sobre la base de hechos y pruebas. El foco aquí en Brasil, al menos aquí en Curitiba, siempre fue Petrobras. El esquema criminal en Petrobras implicaba pagos de sobornos a agentes de la estatal y agentes políticos que sostenían a esos ejecutivos en sus posiciones. Y esos agentes políticos eran del gobierno, de los partidos que formaban la base del gobierno. Entonces, es natural que el caso se incline a esos partidos.
No obstante, existen partidos de ciertos perfiles que no siempre fueron aliados (del gobierno). Por ejemplo, a pesar de las críticas de que hay una intensidad mayor en relación a agentes del PT (Partido de Trabajadores, de Luiz Inácio Lula da Silva), hemos arrestado y condenado a un ex parlamentario, el ex presidente de la Cámara (Eduardo Cunha), que era considerado como enemigo del PT. Entonces, a mi juicio, las críticas son equivocadas. Es evidente que la justicia tiene que basarse en las pruebas y en la ley, y ser ciega para esas cuestiones partidarias.
Milagros Salazar (Convoca, Perú) La condición para recibir las pruebas de Odebrecht es que los fiscales de otros países no las usen para procesar civil o penalmente a la empresa o sus directores por los acuerdos de leniencia y de delación premiada firmados con la Procuraduría de Brasil. Hace pocas semanas hubo un impasse entre los fiscales de Brasil y Perú porque un fiscal peruano habría incumplido el acuerdo. ¿Desde su experiencia cuánto puede afectar transgredir estos acuerdos en la búsqueda de la verdad y la justicia?
Nosotros tuvimos un caso muy interesante en el pasado con una serie de doleiros brasileños (traficantes de divisas) envueltos en la operación de lavado de dinero, que mantenían cuentas secretas en una institución financiera en los Estados Unidos. El caso implicó investigaciones aquí (en Brasil) y en Estados Unidos. Y, en nuestro caso, acabamos escuchando el testimonio del gerente del banco. Era una persona que también tenía responsabilidad criminal porque había dado abrigo a aquellas cuentas facilitando operaciones de lavado de dinero. No obstante, esa persona había hecho un acuerdo de colaboración con las autoridades y acordó dar su testimonio con la condición de no ser procesada en Brasil por esos mismos hechos. Eso fue respetado. Entonces, es importante que haya observancia en la colaboración internacional sobre las condiciones que son colocadas.
La comprensión que se tiene (en el caso de Lava Jato) es que esos crímenes fueron revelados en el ámbito de una colaboración con las autoridades brasileñas. Interesan a los otros países. Pero si esos colaboradores fueran procesados sin cualquier límite en esos países, eso coloca en riesgo los propios acuerdos aquí en Brasil, de ahí la necesidad de tener una cierta protección. Normalmente Brasil ha compartido las pruebas con ese condicionamiento, lo que no impide que los otros países desarrollen su investigación sin acceder a las pruebas de la colaboración, rechacen esa condición y procesen a todo el mundo. Pero si las pruebas vienen de los colaboradores de Brasil, normalmente tiene que colocarse esa condición para preservar los propios acuerdos en Brasil.


Milagros Salazar (Convoca, Perú) Existe la sensación en la sociedad peruana de que las autoridades se están sometiéndo (por el acuerdo de colaboración) a no procesar a los empresarios y directivos que pagaron por la corrupción. Es complicado manejar esta situación…
Cada caso es un caso. Tiene que verificarse lo que puede ser hecho sin la cooperación. Ahora, lo ideal sería que esas empresas que pagaron coima en otros países entraran en acuerdo con las autoridades de esos países, resolviendo la cuestión de una forma más directa, sin necesidad de intermediación por parte de las autoridades brasileñas.
Quisiera dejar bien en claro lo siguiente: el pago de soborno es algo terrible, reprobable y tiene que ser reprimido. Pero por otro lado tiene que resaltarse la actitud de las empresas cuando deciden colaborar. Eso es digno de elogios y de beneficios, si la ley así lo establece. No solo porque hay una expectativa de que esos acuerdos signifiquen no solo la revelación de los crímenes pretéritos, sino por un cambio de postura de las empresas. Lo que no me parece razonable es que cuando ellas pagaban coimas y lo hacían en secreto, eran tratadas de manera muy favorables por las autoridades, y de repente, cuando resuelven revelar sus delitos y cambiar sus prácticas, pasan a ser tratadas de manera más rigurosa. No está bien ese camino.
Otra cosa que creo que es importante, aprovechando la pregunta, es que lo que hicieron las empresas brasileñas fue terrible, reprobable, pero ciertamente no fueron las únicas que pagaron ventajas indebidas por el mundo, inclusive en otros países. Hay una gran posibilidad de que así lo hacían en un ambiente corrupto, para el que ellas contribuían, pero en la cual no son la única causa. Estas investigaciones también son una oportunidad para expandir las indagaciones e identificar otras empresas extranjeras y nacionales de esos respectivos países, que también pagaron ventajas indebidas y estuvieron envueltas en esas prácticas. Lo que fue constatado en las investigaciones en Brasil es que la corrupción era una regla de juego y eso envolvía no a una o dos empresas, sino a varias. Y también las empresas extranjeras pagaron coima a agentes brasileños de Petrobras.
Es importante investigar las responsabilidades, pero desde mi punto de vista también no es correcto vilipendiar a las empresas brasileñas como si fueran las únicas empresas en el mundo que pagan coimas. Ciertamente, si se busca, va a encontrar hechos que envuelven a otras empresas, y eventualmente empresas del mismo país de las autoridades que recibieron esos montos de dinero.
(Como se sabe, las constructoras peruanas que operaron con las empresas brasileñas son Graña y Montero, JJ Camet e Ingenieros Civiles y Contratitas, entre otras. Precisamente, estas compañías conformaron el consorcio Conirsa con Norberto Odebrecht S.A. para construir los tramos 2 y 3 de la carretera Interoceánica Sur por la que la empresa brasileña confesó el pago de cerca de 20 millones de dólares en sobornos para el expresidente Alejandro Toledo. Odebrecht también construyó el tramo 1 de la Línea 1 del Metro de Lima con Graña y Montero, otra obra por la que la compañía reveló haber coimeado a funcionarios durante el gobierno de Alan García).

Investigaciones de Lava Jato en 13 países oscilan entre el rigor y la impunidad

Argentina
Por Emilia Delfino (Diario Perfil)

Odebrecht admitió haber pagado al menos 35 millones de dólares en Argentina, pero aún no se conoce oficialmente quiénes fueron los destinatarios de los pagos. Tres de las obras de la compañía están en la mira judicial por presuntos sobreprecios, cartelización y coimas: la planta potabilizadora Paraná de Las Palmas, la ampliación de los gasoductos de 2006 y el soterramiento del ferrocarril Sarmiento.
El caso toca de lleno a exfuncionarios del matrimonio Kirchner, entre ellos el entonces ministro de Planificación, Julio de Vido, y al primo del presidente Mauricio Macri, Angelo Calcaterra, exsocio de Odebrecht.
El principal obstáculo para probar los sobornos es que la legislación argentina no permite un acuerdo de colaboración en los mismos términos en los que se realizó en Brasil.
Camargo Correa es investigada por otra planta potabilizadora. Techint es blanco de una causa por el caso Angra3. Contreras Hermanos afronta un expediente por presuntos sobornos.
Gustavo Arribas, jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), fue acusado de recibir dinero del doleiro Leonardo Meirelles. Ninguno de los jueces de la causa permitió que se investigara.
Julio de Vido, exministro de Planificación e involucrado en caso Lava Jato. Foto: Política Judicial.

Brasil
Por Flávio Ferreira (Folha de Sao Paulo)

Hasta el momento, la condena del expresidente de la República, Luiz Inácio Lula da Silva, a nueve años y seis meses de prisión por el juez federal Sergio Moro es la principal decisión judicial de la Operación Lava Jato en Brasil.
El caso también llevó a la presentación de la denuncia penal contra el presidente de la República Michel Temer, acusado de corrupción pasiva. La Procuraduría General de la República alega que Temer actuó para favorecer los negocios del empresario Joesley Batista, de la empresa JBS.
Ahora la Procuraduría negocia una posible delación premiada con dos grandes constructoras brasileñas que operan en varios países de América Latina y que también son investigadas en el caso Lava Jato: OAS y Queiroz Galvão.
Luiz Inácio Lula da Silva, expresidente brasileño y hoy condenado a 9 años y medio de prisión por caso Lava Jato. Foto: Reuters.

Colombia
Por Colombiacheck

El escándalo de Odebrecht en Colombia ha dejado hasta el momento ocho personas en la cárcel o con medida de aseguramiento y a otras trece se les imputan cargos por varios presuntos delitos. El funcionario de más alto nivel que está en la cárcel y que confesó su culpabilidad es Gabriel García Morales, exviceministro de Transporte en el mandato presidencial de Álvaro Uribe Vélez. El excongresista Otto Bula Bula también está preso aunque éste se declaró inocente.
La Fiscalía colombiana compulsó copias a la Corte Suprema de Justicia para que investigue al congresista Bernardo Miguel Elías Vildal y al excongresista Plinio Olano.
La Procuraduría colombiana, entidad encargada de investigar las actuaciones de los funcionarios, también ha vinculado formalmente en un proceso disciplinario a las exministras Gina Parody y Cecilia Álvarez.
Según las confesiones de Odebrecht, publicadas por el Departamento de Justicia de Estados Unidos en diciembre último, la multinacional brasileña pagó sobornos en Colombia por más de 11 millones de dólares entre 2009 y 2014. La compañía obtuvo beneficios que superaron los 50 millones de dólares.
Respecto a información que han dado funcionarios de Odebrecht a la Fiscalía colombiana sobre ilícitos de la multinacional en el país, el ente acusador solo ha revelado que han colaborado en el contrato Ruta del Sol.
Los representantes de Odebrecht solo han revelado información de estos hechos ilícitos sobre el contrato de Ruta del Sol, de acuerdo con información de la Fiscalía colombiana.
Gabriel García Morales, exviceministro de Transporte y uno de los involucrados en caso Lava Jato en Colombia. Foto:Revista Semana.

Ecuador
Por Christian Zurita (Mil Hojas)

El vicepresidente de Ecuador Jorge Glas Espinel ha repetido incansablemente que en 2008 estuvo a punto de sacar a patadas de su oficina a Marcelo Odebrect. El conflicto sucedió porque la constructora se negó a ejecutar arreglos de importancia en una central hidroeléctrica. Por esa razón la empresa fue expulsada del país, pero en 2011 Odebrecht regresó con fuerza y logró firmar 4 mil millones de dólares en contratos, la mayor parte bajo la responsabilidad de Jorge Glas.
Hoy se sabe que las obras fueron sobrefacturadas por más de 500 millones de dólares y que el principal implicado hasta el momento es Ricardo Rivera Arauz, tío materno y hombre de confianza del vicepresidente Glas.
El Ministerio Público de Ecuador acusó a Rivera de haber recibido el 1% de cada contrato y adenda firmada por la empresa en el país. Se han abierto siete investigaciones, existen siete detenidos y un prófugo: el Contralor General del Estado, Carlos Pólit Faggioni, la máxima autoridad en la vigilancia de los recursos del Estado hoy acusada de recibir dinero de Odebrecht.
Jorge Glas no ha sido involucrado en la investigación penal pero la oposición parlamentaria intenta llevarlo a juicio político y destituirlo.
Ricardo Rivera Arauz, tío del vicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, investigado por caso Lava Jato. Foto: El Universo.

El Salvador
Por Jimmy Alvarado (El Faro)

La Fiscalía General de la República – de El Salvador- confirmó el 13 de junio comunicaciones con la justicia brasileña para intercambiar información sobre los aportes monetarios de Odebrecht que fueron gestionados para la campaña de Mauricio Funes, quien fue elegido presidente en marzo de 2009.
El fiscal general Douglas Meléndez dijo ante las preguntas de la prensa que no podía confirmar el monto todavía, pero aseguró que según algunos testimonios de “criteriados” brasileños podía concluirse que se trataba de varios millones de dólares. Funes negó en redes sociales que su campaña se nutriera de aportes de Odebrecht.
"Publicistas (brasileños) aseguran que recibieron 3 millones de dólares para producir la campaña de Mauricio Funes (expresidente salvadoreño)."
De acuerdo a las confesiones de Joao Santana y Mónica Moura –los publicistas que hicieron la campaña de Mauricio Funes–, el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva intercedió para hacer llegar aportes a la campaña de Funes debido a la amistad que mantenía con Vanda Pignato –quien en ese entonces era la esposa de Funes– porque ella es brasileña y había militado en el Partido de los Trabajadores (PT).
En una planilla de la División de Operaciones Estructuradas que registra una cuenta mantenida entre Odebrecht y el Partido de los Trabajadores, figura la siguiente anotación: “Evento El Salvador vía Feira: 5.3”. Según las confesiones de Marcelo Odebrecht, Fernando Migliaccio y Hilberto Silva, ese apunte hace referencia a un aporte de la campaña de Mauricio Funes.
Los publicistas aseguran que recibieron 3 millones de dólares –5.3 millones de reales brasileños según el tipo de cambio en 2008– para producir la campaña de Mauricio Funes, quien en septiembre de 2016 se exilió en Nicaragua en medio de una investigación en El Salvador por un incremento patrimonial injustificado, no relacionado al caso Odebrecht.
En la misma planilla de Odebrecht también aparece otro monto equivalente a 3 millones de dólares que fueron destinados a la campaña electoral de otro expresidente de América Latina: Ollanta Humala de Perú, hoy con prisión preventiva junto a su esposa Nadine Heredia.
Mauricio Funes, expresidente salvadoreño e involucrado en caso Lava Jato. Foto: El Nacional.

Guatemala
Por Daniel Villatoro (Plaza Pública)

Nadie ha sido acusado. En Guatemala no se han revelado los pagos de coimas de Odebrecht a políticos y funcionarios.
La investigación está a cargo de la Comisión contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), financiada por Naciones Unidas.
Según Juan Francisco Sandoval, jefe de dicha fiscalía, la investigación se encuentra en reserva por lo que no da más detalles excepto que Guatemala sí tiene un convenio con las autoridades brasileñas para compartir información.
En un operativo del caso Petrobras, en diciembre de 2014, en la oficina del presidente de OAS se encontró un papel con el nombre del entonces ministro de obra pública y futuro candidato a la presidencia: Alejandro Sinibaldi, prófugo y acusado de aceptar sobornos de proveedores durante su gestión.
El papel escrito a mano también incluía menciones al entonces presidente, Otto Pérez (en prisión por defraudación aduanera), posibles pagos a su publicista español, Antonio Solá, y presuntos pagos a 105 diputados por un monto de 40 mil dólares cada uno.
Odebrecht llegó a Guatemala en 2012 cuando el Congreso aprobó dos préstamos para la ampliación de una carretera que empieza en la frontera con México; uno con BNDES de 280 millones de dólares y otro con un banco centroamericano por 119 millones de dólares. La vía fue diseñada con una extensión de 140 kilómetros que a pesar que terminó reducida en 48 kilómetros fue construida por el mismo precio inicial.
Alejandro Sinibaldi, exministro guatemalteco e involucrado en caso Lava Jato. Foto: Plaza Pública.

México
Por Raúl Olmos (Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad)

Las autoridades de México han decidido imponer una estrategia de silencio en el caso Lava Jato para evitar que el escándalo de corrupción internacional haga eco en la opinión pública.
Además, la investigación va muy rezagada. La Procuraduría General de la República abrió un expediente del caso apenas el pasado 17 de enero de 2017, casi un mes después de que ejecutivos de la constructora Odebrecht confesaron en una corte de Estados Unidos que habían pagado 10.5 millones de dólares en sobornos entre 2010 y 2014 a funcionarios mexicanos a cambio de contratos de obra.
La petrolera mexicana PEMEX decidió reservar por tres años (hasta el año 2020) todos los contratos asignados a Odebrecht, mientras que la Procuraduría argumenta que está impedida legalmente para dar a conocer avances de la investigación y para informar los nombres de los políticos o funcionarios públicos involucrados en la red de corrupción internacional. La reserva de información se extendió a 20 años en el caso de un contrato asignado por PEMEX para suministrar gas etano hasta 29% más barato, para que Odebrecht lo procese en una planta petroquímica que instaló en el estado de Veracruz.
Lo poco que se ha logrado saber del caso Odebrecht en México ha sido por investigaciones periodísticas, principalmente de la revista Proceso y de la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), que ha difundido sus reportajes en alianza con los sitios AristeguiNoticias, Animal Político y el periódico El Financiero.
Gracias a estas investigaciones independientes, hoy se sabe que Odebrecht recibió un trato privilegiado durante el Gobierno del presidente Felipe Calderón Hinojosa (del partido conservador Acción Nacional), quien permitió incumplimientos, autorizó ampliaciones de contrato y pagos ilegales en la modernización de la refinería de Minatitlán, en el estado de Veracruz, lo que provocó que el costo de la obra creciera en 80% (equivalente a 450 millones de dólares). Pese a graves irregularidades en las que incurrió Odebrecht, documentadas por la Auditoría Superior de la Federación del Congreso de México, el gobierno del actual mandatario Enrique Peña Nieto (del oficialista Partido Revolucionario Institucional) otorgó por asignación directa más contratos millonarios a la constructora brasileña. En todos los casos se otorgaron ampliaciones o adendas a los contratos.
En total, entre 2006 y 2015 Odebrecht obtuvo en México contratos por alrededor de 2 mil 500 millones de dólares, además de obtener el suministro de gas etano a precio preferencial para un negocio que representa ventas anuales por otros 2 mil 500 millones de dólares y la concesión para la explotación del servicio de agua en la zona metropolitana de Veracruz. El contrato más cuantioso corresponde a la segunda etapa del gasoducto Los Ramones, en el norte de México, el cual se asignó en forma directa en 2014 a través de una red de empresas de papel que PEMEX creó en paraísos fiscales.
Las investigaciones periodísticas también han podido confirmar un soborno por 383 mil dólares para la ejecución de una presa hidroeléctrica en el estado mexicano de Michoacán y la transferencia de 3 millones 754 mil dólares a una empresa fantasma ligada al exgobernador del estado de Veracruz, Javier Duarte. En ambos casos, los fondos fueron transferidos por la División de Operaciones Estructuradas de Odebrecht a través de empresas offshore.
Emilio Lozoya Austin, director de la petrolera mexicana PEMEX e involucrado en caso Lava Jato. Foto: Pemex.

Panamá
Por Investiga Lava Jato

En Panamá, el Ministerio Público creó la Fiscalía Especializada Anticorrupción para investigar el caso Odebrecht.
El 24 de enero, formuló cargos a 17 personas por blanqueo de capitales, entre ellos exfuncionarios y empresarios. Aunque no revelaron las identidades, en la lista aparecen dos hijos del expresidente Ricardo Martinelli: Luis Enrique y Ricardo Martinelli Linares. También figuran los socios de la firma Mossack Fonseca, conocida en el mundo por los Panama Papers, Ramón Fonseca Mora y Jürgen Mossack. Hasta el momento, se han abierto 24 investigaciones y hay 36 personas procesadas.
La procuradora General de la Nación, Kenia Porcell, se reunió en dos oportunidades con sus pares de la Fiscalía de la República Federativa de Brasil. El primer encuentro fue el 16 de febrero de 2017, cuando con otros fiscales de la región suscribieron la Declaración de Brasilia sobre la Cooperación Jurídica Internacional contra la Corrupción. El segundo fue el 9 de junio con la finalidad de coordinar los mecanismos mediante el cual se atenderán las asistencias internacionales solicitadas por Panamá en el caso Odebrecht.
Hasta el momento, el Ministerio Público no ha logrado un acuerdo con las autoridades de Brasil que permita tener acceso a los testimonios brindados por los ejecutivos de la empresa en las delaciones. Esto ha ocasionado un aluvión de críticas en el país y hasta denuncias contra Porcell, quien no acepta el compromiso de no usar esa información para procesar a Odebrecht y sus colaboradores brasileños.
Las administraciones de dos expresidentes y el actual presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, otorgaron contratos millonarios a Odebrecht y hoy la sociedad pide que sean investigados.
Juan Carlos Varela, presidente de Panamá e involucrado en caso Lava Jato. Foto: Acento.

Perú
Por Óscar Libón (Convoca)

El equipo especial del Ministerio Público a cargo del caso Lava Jato en Perú tiene 40 investigaciones en proceso a nivel nacional relacionadas a la presunta corrupción de empresas brasileñas en el país, durante los tres últimos periodos presidenciales.
La carpeta fiscal principal se abrió en junio de 2015 debido a presuntos pagos de sobornos entregados por la compañía brasileña Camargo Correa a funcionarios del gobierno de Alejandro Toledo y Alan García, como fue revelado por Convoca en alianza con la plataforma Brío. Tiempo después se iniciaron investigaciones por las coimas vinculadas a la constructora OAS y recién en noviembre de 2016 por el caso Odebrecht.
Entre los investigados del caso Lava Jato en Perú figuran los expresidentes Alejandro Toledo, Alan García y Ollanta Humala, así como exministros, un viceministro, exaltos funcionarios del Ministerio de Transportes y Comunicaciones y otras entidades públicas, además de autoridades municipales y regionales, empresarios y abogados.
Hasta el momento, el Poder Judicial ha ordenado la prisión preventiva para ocho personas bajo la acusación de haber recibido sobornos de parte de Odebrecht para beneficiarla con contratos de obras y concesiones, una de ellas es el exmandatario Toledo que está prófugo en Estados Unidos.
La semana pasada, el expresidente Humala y su esposa Nadine Heredia fueron recluidos, en diferentes penales, por un caso de presunto lavado de activos relacionado a los 3 millones de dólares supuestamente entregados por la constructora brasileña para la campaña electoral del Partido Nacionalista en 2011. Este monto aparece en una planilla de la División de Operaciones Estructuradas de la empresa y fue destinado a Humala, según confirmó Marcelo Odebrecht, a pedido del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
Odebrecht confesó en Estados Unidos haber pagado coimas por US$29 millones en Perú, pero las pesquisas fiscales indican que hubo más sobornos. El caso Lava Jato también se investiga en el Congreso desde hace seis meses y su función fue ampliada hasta julio de 2018.
Ollanta Humala, expresidente peruano y hoy con prisión preventiva por un pago de Odebrecht para su campaña presidencial. Foto: Andina.

República Dominicana
Por Investiga Lava Jato

República Dominicana es uno de los países cuyas autoridades cerraron el acuerdo de delación premiada con la empresa Odebrecht pocos meses después que la compañía firmara los términos de la colaboración con Brasil, Suiza y Estados Unidos, donde admitió el pago de sobornos en 12 países.
La medida tuvo como resultado llevar a prisión en mayo último al ministro de Industria y Comercio, Juan Temístocles Montás, y otras siete personas acusadas de recibir sobornos de Odebrecht.
El último domingo, miles de dominicanos protestaron contra la corrupción y exigieron que el presidente Danilo Medina sea procesado por obstruir la justicia.
Exministro dominicano Juan Temístocles Montás, procesado por caso Lava Jato. Foto: El Viajero Digital.

Venezuela
Por Lisseth Boon y Jesús Alberto Yajure (Runrunes y El Pitazo)

Conocer los nombres de los funcionarios e intermediarios en Venezuela que cobraron 98 millones de dólares en sobornos para obtener y mantener megacontratos de la constructora Odebrecht, podría depender de una sola persona: la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, quien desde el Ministerio Público se encarga de investigar el capítulo local del caso de corrupción más grande de la historia de Brasil que involucra a otros 11 países de América Latina y África.
La fiscal Ortega Díaz ya había solicitado meses atrás la detención del brasileño Euzenando Praceres Azevedo, director de la constructora Odebrecht en Venezuela, quien se acogió a los acuerdos de delaciones premiadas y colabora con las autoridades brasileñas en el caso Lava Jato, que involucra no solo a Odebrecht sino a otras cuatro empresas que pagaron millones de dólares en sobornos en al menos 21 países.
Sin embargo, las recientes imputaciones a María Eugenia Baptista Zacarías y Elita del Valle Zacarías Dias son las primeras que realiza el Ministerio Público a ciudadanos venezolanos. Baptista, de 39 años, y Zacarías, de 64, son esposa y suegra, respectivamente, de Haiman El Troudi, actual diputado por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), el partido del presidente Nicolás Maduro.
El Troudi también ocupó la cartera de Planificación y Desarrollo, fue ministro de Transporte y Obras Públicas y presidente hasta septiembre de 2015 de la empresa estatal Metro de Caracas.
Antes de conocerse las imputaciones, la fiscal Ortega Díaz anunció el inicio de las citaciones a personas vinculadas a funcionarios con responsabilidad sobre obras o contratos otorgados por el Estado venezolano a la constructora Odebrecht. Aseguró además en una entrevista en radio que funcionarios vinculados a las obras habían recibido comisiones. “Incluso estos [funcionarios] que recibieron comisiones las depositaron en el extranjero, en algunos casos a nombre de familiares. Todo eso nosotros lo tenemos bien organizadito”, aseguró.
En enero de 2008, como ministro de Planificación y Desarrollo, El Troudi designó a su propia esposa, María Eugenia Baptista Zacarías, en el cargo de Directora de Relaciones Institucionales, según consta en la Gaceta Oficial Nº358.932 del miércoles 9 de enero de 2008. Baptista es además militante del PSUV y también trabajó para el Servicio Autónomo de Protección al Niño y Adolescente (Sapranan) del estado Monagas. Baptista aparece como directora de la sociedad Publicicorp, SL. registrada en el número 8 de la calle Alcántara en Madrid, España. Las sociedades las crearon un mes antes de que se difundiera un vídeo en el que se veía a El Troudi y a su familia volver desde Francia en primera clase vía Guadalupe.
Pero esta no es la única sociedad levantada por la familia de la esposa de El Troudi. Su suegra, Elita del Valle Zacarías Dias, constituyó en julio de 2016 tres sociedades inmobiliarias en París. Zacarías también trabajó en Sapranam, según el Instituto Venezolano de Seguros Sociales. Estas sociedades se registraron entre el 6 y 11 de julio de 2016 con los nombres de Saint Mathis 238, Saint Claire 230 y Saint Marie Sasa 238. Cada una tiene un capital de 1.000 euros y tienen por objeto la compra y venta de bienes inmobiliarios.
Haiman El Troudi, diputado venezolano e involucrado en caso Lava Jato. Foto: Runrunes.
Ambas mujeres deberán comparecer el próximo 27 de julio ante las autoridades. Una fuente portavoz del Ministerio Público aseguró a El Pitazo que son investigadas por delitos de legitimación de capitales.
La diligencia ha causado revuelo en Venezuela. La Fiscal Ortega Díaz no mencionaba a la constructora desde febrero de 2017, cuando firmó en Brasil un convenio de cooperación para investigar las empresas del caso Lava Jato con la Procuraduría General de ese país, a pesar que ya en mayo se conocía que el propio Maduro —entonces en el cargo de canciller— pagó al menos 11 millones de dólares en efectivo provenientes de las empresas Odebrecht y Andrade Gutiérrez a Mónica Moura, esposa del publicista João Santana, estratega y asesor de la campaña presidencial de Chávez en 2012.
Como parte de la serie de reportajes de Investiga LavaJato, Runrunes y El Pitazo revelaron que Odebrecht pagó vía “Caja 2” al menos 13 millones de dólares de un total de 98 millones de dólares en sobornos en 2014 por cuatro obras que aún no se han construido. La fiscal todavía no se pronuncia al respecto.

Angola
Por Rafael Morais (Maka Angola)

Mientras los principales ejecutivos de la empresa Odebrecht contemplan sus días en la cárcel, en Brasil, y enfrentan a la justicia en la mayoría de los países0 donde operan, en Angola la multinacional está en el paraíso de la impunidad.
Las revelaciones recientes, según las cuales Odebrecht aportó 50 millones de dólares, en 2012, para la campaña de reelección del presidente José Eduardo dos Santos y de su partido, MPLA, fueron recibidas con indiferencia institucional. A nivel de la sociedad, se volvió a confirmar lo que desde hace mucho tiempo es de dominio público. Odebrecht y el Presidente duermen juntos en la misma cama de la corrupción.
Desde la independencia, en 1975, los angoleños no conocen otro poder. El Movimiento Popular de Liberación de Angola (MPLA) gobierna hace 41 años y José Eduardo dos Santos hace 37.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos informó en diciembre último que entre 2006 y 2013, Odebrecht corrompió gobernantes angoleños con unos 50 millones de dólares para obtener beneficios por 261 millones de dólares. Odebrecht se reconoció culpable de estos actos ilícitos cometidos en Angola. Sin embargo, las autoridades del país ignoraron esa admisión.
La mayor indignación causada por Odebrecht en Angola se debe a las declaraciones de Emilio Odebrecht como parte de la delación en Brasil, en las que señaló que no había condiciones para vivir en Angola porque sus pobladores usaban el inodoro como “florero”.
La corrupción en Angola es generalizada como lo revela el escándalo del estatal Banco de Poupança e Crédito. Un diputado del MPLA, Monteiro Pinto Kapunga, se hizo multimillonario al recibir un crédito de 687 millones de dólares. Otro, Elías Chimuco, se ganó 435 millones de dólares. El hijo del Presidente, que también dirige al Fondo Soberano de Angola, obtuvo 324 millones, mientras el sobrino, el general Bento Kangamba, recibió 318 millones de dólares. Kangamba es el mismo general acusado en Brasil de tráfico internacional de mujeres y denunciado como jefe de una red internacional de prostitución. A su vez, la hermana del presidente, Marta dos Santos, a través de su empresa Marsanto, obtuvo un préstamo de 13 millones de dólares. Como no podía ser de otro modo, Odebrecht también obtuvo un crédito de ese banco, aunque sólo de 357 mil dólares.
Las investigaciones en Brasil y en Portugal, destinos internacionales predilectos para el blanqueo de capitales angoleños en complicidad con las élites políticas y empresariales de esos países, han estrechado el cerco al régimen de José Eduardo dos Santos. Y quedan cada vez más expuestos a un día de revuelta popular.
José Eduardo dos Santos, presidente de Angola y vinculado a caso Lava Jato. Foto: The Cable.

Mozambique
Por Adérito Caldeira (Jornal @Verdade)

La justicia de Mozambique optó por ignorar la revelación de que Norberto Odebrecht pagó sobornos a altos funcionarios del gobierno para poder obtener términos favorables en la construcción de un aeropuerto en la ciudad de Nacala.
En un acuerdo de reducción de pena firmado en diciembre de 2016 con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, la constructora brasileña admitió haber pagado sobornos por 900 mil dólares a funcionarios del gobierno de Mozambique entre 2011 y 2014.
Las coimas incluían aproximadamente 250 mil dólares en pagos para funcionarios de alto nivel del gobierno de Mozambique a cambio de obtener términos favorables en la construcción de un proyecto gubernamental. Odebrecht efectuó los pagos en dos cuotas de 135 mil dólares y 115 mil dólares a través de su División de Operaciones Estructuradas mediante una compañía con sede en un paraíso fiscal, según el informe de Estados Unidos. La única obra que ejecutó Odebrecht en Mozambique es el aeropuerto de Nacala.
En febrero pasado, el Gabinete Central de Combate a la Corrupción (GCCC) mozambiqueño afirmó que estaba investigando el caso de sobornos, aunque aguardaba al 1 de junio, día en que venció el plazo de sigilo de seis meses previsto en las delaciones de Odebrecht.
Al término del plazo, la Procuraduría General de la República brasileña informó cuáles eran los países que habían solicitado documentos y testimonios de ejecutivos de la constructora, y Mozambique no era uno de ellos.
Desde entonces, @Verdade contactó al GCCC así como a la Fiscalía General de Mozambique, sin obtener hasta el momento respuesta alguna. Como parte del proyecto colaborativo ‘Investiga Lava Jato’, el portal Convoca, de Perú, preguntó si Mozambique solicitó información a Brasil al fiscal Vladimir Aras que está a cargo de coordinar desde la Procuraduría de Brasilia la entrega de las pruebas de Odebrecht a los países de América Latina y África. El fiscal Aras respondió que la información aún se mantiene en reserva.
El aeropuerto de Nacala comenzó a ser construido en el norte de Mozambique en septiembre de 2001, con un costo inicial de 110 millones de dólares y después de dos agregados a la construcción original, quedó concluido y fue inaugurado en diciembre de 2014 con un costo que superaba los 210 millones de dólares, de los cuales 125 fueron financiados por el Banco Nacional de Desarrollo Económico de Brasil (BNDES) (Ver el aplicativo ‘VíaSobrecosto’). El resto lo desembolsaron dos bancos mozambiqueños.
A pesar de que no estén identificados los funcionarios de “alto nivel” que fueron sobornados, @Verdade averiguó que por el Gobierno de Mozambique, que en esos días estaba dirigido por Armando Guebuza, lideraron las negociaciones el entonces ministro de Transportes y Comunicaciones, Paulo Zucula, y el de Finanzas, Manuel Chang, y que en ese momento el Consejo de Administración de la Empresa Aeropuertos de Mozambique estaba a cargo de Manuel Veterano.
El aeropuerto puede recibir aviones de gran porte en vuelos intercontinentales directos, funciona apenas dos días por semana, cuando recibe un vuelo de la compañía aérea mozambiqueña.
Paulo Zucula,exministro de Transporte y Comunicaciones de Mozambique y uno de los funcionarios que lideró las negociaciones en el aeropuerto de Nacala. Foto: Trademark
El aeropuerto de Nacala comenzó a ser construido en el norte de Mozambique en septiembre de 2001, con un costo inicial de 111.753.087,16 dólares. Después de dos agregados a la construcción original, quedó concluido y fue inaugurado en diciembre de 2014, con un costo final de 216 216.288.261,08 dólares, de los cuales 125 fueron financiados por el Banco Nacional de Desarrollo Económico de Brasil (BNDES). El resto lo desembolsaron dos bancos mozambiqueños.
A pesar de que no estén identificados los funcionarios de “alto nivel” que fueron sobornados, @Verdade averiguó que por el Gobierno de Mozambique, que en ese momento era dirigido por Armando Guebuza, lideraron las negociaciones los entonces ministros de Transportes y Comunicaciones, Paulo Zucula, y Finanzas, Manuel Chang, y por el presidente del Consejo de Administración de la Empresa Aeropuertos de Mozambique en ese momento, Manuel Veterano.
El aeropuerto, cuyo costo aumentó en 63 millones de dólares y puede recibir aviones de gran porte en vuelos intercontinentales directos, funciona apenas dos días por semana, cuando recibe un vuelo de la compañía aérea mozambiqueña.

LA VERSIÓN DE ODEBRECHT
La empresa Odebrecht señaló en comunicaciones anteriores que está colaborando con las investigaciones de Lava Jato y que no sobrefacturó las obras.
La empresa informó que suscribió un acuerdo de leniencia en Brasil, Suiza, República Dominicana, Ecuador y Estados Unidos y que “está comprometida en presentar los esclarecimientos necesarios para dilucidar todos los hechos”.
Según la constructora, los sobornos que confesó fueron pagados para garantizar la adjudicación de las licitaciones y el cumplimiento regular de los contratos.
En junio último, los periodistas de ‘Investiga Lava Jato’ publicamos una investigación en la que revelamos que 50 obras en siete países tuvieron costos adicionales por más de 6 mil millones de dólares en relación a los valores iniciales entre 2001 y 2016.
De este número de obras con saltos presupuestales en Perú, Panamá, República Dominicana, Ecuador, México, Colombia y Mozambique, 31 se encuentran investigadas por el Ministerio Público o la Contraloría de estos países. Es decir, el 61 por ciento del número total. Mientras que siete de estas obras, el 23 por ciento, aparece en las planillas de la División de Operaciones Estructuradas de Odebrecht conocida como la “Oficina de sobornos”, de acuerdo al análisis de los documentos realizado por los periodistas de ‘Investiga Lava Jato’ hasta el 15 de junio.
La mayoría de los incrementos de presupuesto fueron por extensiones de plazos, obras adicionales y alteraciones de ingeniería, que en varios casos se encuentran bajo investigación por la justicia. Estas operaciones extras no pasaron por concursos públicos y se mantuvieron en manos de la constructora brasileña y sus socias mediante reiteradas modificaciones a los contratos o normas especiales que se saltaron las leyes de contrataciones.

La Condamine y Anne Malherbe, silencio y estigma en dos casos de abuso sexual

MilHojas.is


Imagine a un hombre planificando paso a paso la seducción de una niña. Sucedió en el liceo La Condamine de Quito desde en el año 2010. El profesor de matemáticas Jean Damien Toulouse entabló una fuerte y estrecha relación con Victoria, entonces de 11 años. A fuego lento, con los días y los años, levantó una relación que en principio parecía paternal pero con el tiempo consolidó otros deseos.
Él era un capacitado maestro, casado, valorado en la sociedad, incapaz de un acto inapropiado. Pero fuera de esa condición pública el profesor le escribió en secreto miles de mensajes. Victoria encontró en él un refugió a sus necesidades afectivas, fue una relación construida por correspondencia con mensajes que iniciaron con frases como “Te quiero como un padre” pero al final le escribía “me contengo para no tocarte”.
El caso fue descubierto por la madre de Victoria cuando notó que la adolescente presentaba un notable malestar emocional: “fue un día que lloró y mencionó que no quería vivir, hasta entonces no había dado muestras de ese tipo de comportamiento y decidí saber qué pasaba”.
La madre, Laura, compartió sus temores con amistades que le recomendaron acceder al teléfono de Victoria. Entonces ideó un plan para conocer las contraseñas del equipo y le retuvo una semana el teléfono como castigo. Envió a la niña unos días a la casa de su mejor amiga y fue entonces cuando accedió a miles de correos del profesor.
Descubrió que el maestro le incitaba a lacerarse. Supo que la llevaba hasta el extremo de la fragilidad y luego la rescataba con mensajes reconfortantes. Victoria se había provocado cortaduras por amor y él las promovía. En uno de esos mensajes Touluse le dijo: “He hablado con Dios y dice que está bien lo que haces”. Touluse era su timón y en los límites de la desesperación él estaría para rescatarla.
El 13 de febrero de 2015, Laura denunció a Touluse a las autoridades del colegio La Condamine. Entonces Victoria tenía 16 años y el profesor 39.  La madre presentó como evidencia un extenso informe con los mensajes enviados entre la alumna y el profesor.
El colegio recomendó no intervenir, lo hizo el ministerio de Relaciones Laborales que, con pruebas en mano, ordenó el visto bueno. Días después, el 25 de febrero fue arrestado por la policía especializada para niños, niñas y adolescentes, acusado del delito de contacto con finalidad sexual con menores de 18 años por medios electrónicos.
Sin embargo La Condamine montó un discurso que no favoreció a Victoria y a su madre. Dijo que era imposible que en el colegio un profesor pudiese estar a solas con un alumno: “El funcionamiento de la escuela hace realmente imposible que un hecho de esta naturaleza haya sucedido en el interior del establecimiento”.“La seguridad en La Condamine no permite ninguna anormalidad”, fueron expresiones de maestros que defendieron al colegio cuando se inició el juicio penal. Las autoridades actuaron bajo la premisa de que un caso de violación o acoso no era posible porque ellos laboraban con un riguroso sistema de organización y vigilancia.
Fue una forma de cerrar ojos y oídos a los hechos. Antes ya lo hicieron en el caso de El Principito: en febrero de 2014, la madre de Lukas, un niño de cinco años, estudiante de maternal, fue víctima de abuso sexual por parte de su profesor de natación. “Las medidas de seguridad para los niños son muy rígidas y adecuadas”, dijo entonces La Condamine.
Ese esquema motivó a que la palabra de las víctimas pierda validez
. En el proceso judicial el colegio permitió que maestros, padres de familia y estudiantes acudan libremente a rendir declaraciones sobre el caso. En su mayoría no sabía que sucedió pero se inclinaron a defender al maestro.

Anne Malherbe defendió abiertamente al acusado por la violación de Lucas, El Principito. José V, fue sentenciado a 22 años de prisión, la presencia de Caupolican Ochoa como abogado del demandado no fue suficiente

Colegas de Touluse dijeron que era una persona respetuosa, seria, responsable de sus actos. “Tenemos el testimonio de nuestros hijos quienes certifican dicho comportamiento, además de habernos manifestado que nunca han visto o han sentido ningún comportamiento inapropiado para con ellos de parte del señor”, escribieron decenas de padres en un certificado de honorabilidad, expedido el 10 de marzo de 2015, también  firmado por Anne Malherbe Gosseline, quien a la fecha era profesora de la institución.
A Malherbe nunca les interesó ser primera dama de la nación, pero no tuvo empacho de usar su apellido e influencia al momento de defender abusadores que consideró sus compañeros.
Dos maestros señalaron que el profesor era una “persona honesta en todas sus acciones, eficiente en su trabajo”. Los testimonios señalaron a Victoria como la acosadora, según ellos, era ella quién buscaba al profesor: “Yo le dije a ella que era un hombre casado”, “desde que llegó ella le perseguía”, “ella salía del aula para ir tras de él”.
Para los maestros la responsable era la niña porque siempre la veían detrás del profesor: “era un acoso permanente de ella hacia el profesor”, dicen parte de los testimonios.
Para maestros y padres de familia, que en buena medida representan a la sociedad media alta de Quito, la posibilidad de que una adolescente de 16 años haya sido seducida por un hombre de 39, aprovechándose de su inexperiencia y posición, no existió. Ella fue la entregada, la provocadora, la que incitó el maltrato y la destrucción de la reputación de un hombre respetable.
Cincuenta 
profesores declararon en contra de la adolescente, 40 estudiantes hicieron lo mismo, sin embargo todo quedó demostrado en el proceso judicial. La  contundencia de las pruebas, 150 páginas de mensajes traducidos del inglés al español y obtenidos del teléfono celular de la adolescente y más de 6.000 mil páginas de mensajes enviados vía correo electrónico por su profesor, sumadas a la decisión y valentía de una madre aguerrida y una adolescente admirable, se impusieron por sobre el descrédito y el influjo político y personal. El pasado abril el caso terminó en tercera instancia y sentenció al profesor a cuatro años de prisión por el delito de acoso por medios digitales.
Touluse guarda prisión domiciliaria y es recomendado para dictar clases particulares desde su casa. Victoria terminó este mes el bachillerato, triunfó sobre quienes la ofendieron y estigmatizaron. Se mantuvo unida a un grupo de amigos leales que nunca se abandonaron. 
 

La verdad

En el expediente se establece que el profesor fue confrontado y dijo que la relación existente entre él y Victoria era una “relación de familia” porque la menor lo quería como a un padre; según Touluse “la chica estaba mal y él, como maestro, había intentado ayudarla y fue la razón por la que ella se encariñó.
El informe de la fiscalía dijo que al preguntarle si él, como padre, aceptaría que alguien se comunique con su hija con frases explícitamente sexuales, respondió que no. Ese momento, dijo que “se estaba dando cuenta que estaba en una relación equivocada”.
El profesor aceptó los hechos, “expresando que su error fue no contener las comunicaciones a tiempo”. Las conversaciones con Victoria se dieron desde el año 2012. Era una chica que buscaba identificarse con un padre, y yo estuve presto para conversar con ella y darle mi atención, así como mi afecto. En las conversaciones encontraron términos como “mi vida, mi amor, my love”, “yo me contengo por no tocarte”.
La evaluación psicológica realizada al profesor por fiscalía, en los primeros días de marzo de 2015, señaló que tiene “labilidad afectiva acentuada”, es decir facilidad para cambiar de estado de ánimo; fuertes inhibiciones personales que le producen ansiedad, angustia flotante, depresión, inseguridad. Indicó además -y  como hecho relevante- que tiene “falta de control consciente sobre los propios sentimientos e impulsos”. 
Los psicólogos evidenciaron que “en el acusado existen pautas de impulsividad y excitación con rasgos de agresividad”. En cuanto a la interrelación social hallaron que había una “importante afectación, ya que pudo encontrarse que el contacto humano está seriamente alterado”. Determinaron, además que había “pobreza empática, incapacidad para aceptar e identificarse con las otras personas, incapacidad para establecer contacto humano profundo”. “Su relacionamiento con los demás tiene características de una persona egocéntrica, quien considera las propias opiniones como irrefutables y trata de imponerlas a toda costa”, rezó el informe.
En marzo de 2017, varias organizaciones de defensa de los derechos de los niños, entregaron una carta al entonces ministro de Educación, Freddy Peñafiel. Pidieron al funcionario intervenir en el caso de El Principito ya que a su criterio La Condamine “no actuó como un buen agente de protección, pues no solo que tomó partido a favor del presunto agresor, sino que además decidió reubicarlo en sus funciones”.

Freddy Peñafiel, entonces ministro de educación, nunca se pronunció al respecto. El es sobrino de la directora del colegio, Silvia Oña.
El caso del principito fue anterior al de Victoria y el comportamiento del plantel fue simirlar. La institución manifestó -al igual que en el caso de Victoria- que no era posible que un hecho de tal magnitud hubiese ocurrido.
Los compañeros del profesor actuaron igual: defendieron a su colega. Dijeron que era “una persona “correcta, cordial, buena, noble, solidaria, eficiente en su trabajo y de “grandes cualidades humanas”, y que Lucas, la víctima, era un “niño problema” con “gran imaginación”, que tenía un “comportamiento de fantasía” y era agresivo con sus compañeros. “Hay ocasiones en las que inventa cosas”. “Es un niño al que le encanta construir cosas, es muy bueno en esta área, dice el testimonio de una maestra.
Los exámenes psicológicos realizados al acusado establecieron que a nivel afectivo presentaba “infantilismo, inmadurez emocional, falta de control de impulsos, inaccesible, defensas paranoides, dependencia dirigida hacia su madre y desarrollo afectivo a nivel de adolescencia”.
La defensa del acusado se basó en asegurar que él era inocente y que los padres de Lucas inventaron la historia a fin de esconder o justificar el comportamiento sexual del menor: “Lo que sucedes es que los padres no quieren aceptar lo que hace su hijo, porque les parece bochornoso y quieren decir que en el colegio una persona le ha molestado sexualmente”, dijo en su momento.
La Fiscalía concluyó que el procesado trató de “endilgar una conducta -por demás inusual- a un niño de tan corta edad, según él los padres tratan de tapar esa inconducta de su hijo culpando a un profesor”.
Mucho se rumorò que el padre de Lucas es quien abuso de él, hoy se sabe que fue una vileza que pretendió desvirtuar la negligencia con la que actuó el colegio al reubicar en funciones a José V., al no haber denunciado el hecho al Ministerio de Educación y peor aún al haber tomado partido a favor del profesor.
El 22 de noviembre de 2016, el profesor de natación fue condenado a 22 años de prisión por el delito de violación. El lunes 13 de febrero de 2017 fue la audiencia de apelación de sentencia por parte del condenado, en la Corte Provincial de Justicia. Ese día, estuvo presente Anne Malherbe Gosseline quien -al igual que en el caso de Victoria- mostró su apoyo al profesor sentenciado.